Vinculan a proceso y trasladan a Cevarepsi a acusado de ataque en Metro
MORELIA, Mich., 4 de septiembre del 2016.- Dos muchachos que habrían escapado de los municipales de Álvaro Obregón en un Mustang, un civil armado, un policía, una mujer y el chofer del presidente, son las piezas clave del rompecabezas en el caso del multihomicidio de 10 personas en Cuitzeo.
Desde la acera de enfrente y a media luz, José Daniel, un ciclista de Plan de la Salud observó cómo tenían a sus vecinos, a sus amigos, Braulio Santiago, Kevin Jaime, Gustavo, Erick, Ricardo, Sergio y Luis Alberto, detenidos, golpeados, a la vez que les mentaban la madre y, dijo, pudo ver al menos cinco policías participando del hecho.
Al interior del comercio, uno de los pocos que la libraron, seis en realidad, refirieron en su declaración que los 10 jóvenes asesinados y otros dos más, habrían sido sacados a punta de golpes de la tienda por un grupo de civiles armados, luego, en compañía de cinco policías, con las insignias de Policía Michoacán, los dispusieron hincados, con las manos sobre la cabeza en el espacio que hay entre dos jardineras.
Acto seguido. Uno a uno los subieron a la cajuela de una camioneta, tipo Tacoma, roja, propiedad del occiso Luis Alberto y que se encontraba en la entrada de la tienda, junto a un coche, tipo Mustang, propiedad, o conducido, por un muchacho de nombre Juan, que se hacía acompañar de otro hombre, del que aún no se tiene noticia, ni de él, ni del tal Juan.
De ser cierto que estuvieron dos muchachos más detenidos, Juan y su acompañante, a los que se les atribuye la propiedad del Mustang y que estaban bebiendo con Luis Alberto, plantea la posibilidad de que escaparan mientras iban siendo levantados o, en su defecto, que también fueron desaparecidos en circunstancias que son desconocidas.
Más información AQUÍ