El presupuesto es un laberinto
Paradójico, que mientras a nivel mundial se conmemoraban los 79 años del Día Internacional de Conmemoración en Memoria de las Víctimas del Holocausto, la agresión contra Gaza seguía.
Un nuevo fracaso de la ONU para detener la agresión de Israel contra Palestina, logró un absurdo mensaje, impedir que se produzca el genocidio, cuando ese genocidio está presente desde hace décadas y se ha recrudecido en los últimos meses de parte de Israel.
La situación que no presagia nada bueno, vuelve los ojos a una de las principales responsables de la situación, la ONU, por no tener calidad ni fuerza para detener una guerra asesina y sus empleados en los diferentes contextos en los que navega ese organismo, se queden mancos con una simple orden como si al tal Benjamín Netanyahu eso le importara.
Es un solo hombre, llevado por el odio más atroz, contra una humanidad de millones que exigen la detención total de la agresión. Pero no hay respuesta.
Durante la conmemoración de la fecha en la que muchos judíos fueron liberados en Auswitz, por las fuerzas soviéticas, estuvieron presentes algunas personas que han resistido estos largos años y que quizá eran niños en la época de su liberación.
Pero mientras Antonio Guterres, el secretario general de la ONU conminaba a “levantarse contra las fuerzas del odio y la división”, aquellas víctimas quizá pensaban en las otras 25 mil víctimas que ha asesinado Nentayahu en solo unos meses, sobre todo niños y mujeres.
Y tal vez, en sus mentes hubo una similitud terrible en algo contra lo que ellos lucharon y lograron sobrevivir, aunque sea en número pequeño : un judío (no el pueblo por fortuna), actuando como Hitler, apoyado por países que fueron aliados contra el perpetrador de la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos e Inglaterra entre ellos.
Ya desdeñado por buena parte de su pueblo y cuando el temible Trump avanza, a Joe Biden le valen las conmemoraciones de algo que pasó hace 79 años. A él le preocupa el cierre de fronteras por la avalancha de migrantes que nos ha echado encima, porque en ello cifra su reelección.
Eso confirma que los dos partidos que dominan la escena en el país vecino son idénticos: Trump, en su toma de posesión hace siete años, lo primero que hizo fue anunciar el muro fronterizo. Pobre México, como lo odian, pero como lo utilizan.
De la Enciclopedia del Holocausto, el sermón famoso Ahora vienen por mi, del pastor luterano alemán Martin Noemöller (1892-1984), que algunos lo atribuyen a Bertolt Brecht. Y al que quizá habría que agregar una nueva frase “ahora vienen por los palestinos”. Por fortuna no ha sido necesario porque millones están hablando a favor de que cese la agresión contra ese pueblo.
Primero vinieron por los socialistas y guardé silencio porque yo no era socialista.
Luego vinieron por los sindicalistas y no hablé porque no era sindicalista.
Luego vinieron por los judíos
y no dije nada porque no era judío.
Luego vinieron por mi y para entonces
ya no había nadie que hablara en mi nombre.