La nueva naturaleza del episcopado mexicano
IIegal. El linchamiento como venganza privada
Al parecer el linchar toma modernidad. Un acto que no se justifica. Ahora utilizan los linchamientos y los atribuyen, ignorantes, al actual régimen por lo que ellos llaman falta de justicia. Se convierte el suyo en un verdadero linchamiento de venganza por los beneficios que perdieron. Una feminista que vivió desahogadamente en los pasados regímenes, y tiene bienes, se confiesa agredida por lo que pasó en Taxco, Guerrero, pero las decenas de casos ocurridos en aquellos sexenios pasan de largo para ella. La mencionada mujer en cuyos esquemas de trabajo (asambleas, encuentros, viajes seguidos al extranjero pagados por nosotros) en los que los feminicidios aumentaron, se refiere a etapas que curiosamente solo comienzan en 2019, para dejar a salvo a sus mandantes. Los hechos de 1968, convertidos en clásicos con el filme Canoa en 1976, marca fechas de linchamientos que siempre han sido continuos aunque a veces no sea todo el pueblo completo el que participe. Esos linchamientos se han visto en carreteras, en los pueblos mismos como víctimas, por las bandas gansteriles, desde siempre. La respuesta del pueblo es similar en muchos casos. Toman a los delincuentes y terminan con ellos. El caso de los 43, aunque lo quieren atribuir solo al ejercito, puede ser el resultado de un presunto linchamiento ordenado ya nos imaginamos de donde. La feminista, pobre, no se acuerda de eso, no obstante que también ocurrió en Guerrero.
HACEN JUSTICIA POR LA PROPIA MANO AL NO APLICAR EL DERECHO
Hacer justicia por la propia mano en contra de nuestro sistema jurídico, no es solo salir en bandada llevados por un influjo atroz, un crimen terrible. No siempre es la expresión de desconfianza del propio pueblo o sector, sino la incapacidad al asumir con rapidez el impacto de un hecho grave y aplicar una justicia propia, particular. Es la aplicación de la venganza privada que la misma biblia menciona en el dicho del que a hierro mata a hierro muere. Por otro lado está la incapacidad mostrada por las propias autoridades de Taxco, por ejemplo, cuyo presidente municipal le echa la culpa a la gobernadora, cuando él mismo tiene autoridades, policía, fuerza, para haber detenido los hechos.
LA VENGANZA PRIVADA ES PELIGROSA Y GENERA MÁS CRÍMENES
La venganza privada, como estructuralmente se llama cuando no se aplica el orden jurídico, no es sino la reacción en el caso de los pueblos, de algo instintivo, inmediato, ante un crimen atroz que se presenta. Pero es también un hecho con agravantes, porque el linchamiento podría quedar en meros golpes y encarcelamiento, pero se llega a la muerte, al asesinato o bien, como ha sucedido, se saca a los culpables de las cárceles hacia donde los han llevado policías que los rescatan y les dan la muerte, los queman o cuelgan. Eso ya se puede considerar premeditación. Y a veces no se trata de casos de asesinatos de inocentes, si no de simples robos o atracos, que no ameritan esa reacción. La llamada rebelión de las masas conlleva instintos destructivos que a veces son incontrolables y rebasan cualquier autoridad, ley y justicia. Hechos que provienen de la autoridad tienen también esa característica, pero ahi está impreso el abuso, como ocurrió en Nochixtlán y otros lugares el pasado sexenio, cuando la policía llegó y masacró a varios y son similares a linchamientos los de los grupos que asaltan en las carreteras y en los pueblos y masacran a varios, porque en esencia no hay la aplicación del derecho. El linchamiento no está tipificado como delito pero de hecho se puede aplicar la ley de acuerdo a los delitos cometidos y a los que participaron directamente.