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GINEBRA, 21 de febrero (Quadratín México).- Con el tema “El libro, eje de la educación en lengua materna”, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) conmemora este jueves el Día Internacional de la Lengua Materna.
La directora general de la UNESCO, Irina Bokova, expresó que los libros son pilares de las sociedades del saber y están a la vanguardia de la promoción de la libertad de expresión y de la educación para todos.
Por ello es importante su vínculo con las lenguas, ya que pueden ser instrumentos poderosos para la preservación y el desarrollo de nuestro patrimonio cultural tangible e intangible.
“En la época de las nuevas tecnologías, los libros siguen siendo instrumentos preciosos, manejables, resistentes, prácticos para el intercambio de conocimientos, la comprensión mutua y la apertura al mundo”, destacó.
La directora aseguró que la ONU ha decidido examinar los lazos entre la lengua y el libro. Ya que también son herramientas esenciales de expresión que participan en el enriquecimiento de las lenguas, al tiempo que preservan la huella de la evolución de las mismas.
Para la UNESCO, el plurilingüismo constituye una fuerza y una oportunidad para la humanidad. “Encarna nuestra diversidad cultural y fomenta el intercambio de puntos de vista, la renovación de las ideas y la ampliación de nuestra imaginación”, mencionó.
Así como se alienta la enseñanza en la lengua materna, que permite luchar mejor contra el analfabetismo y contribuye a una educación de calidad, señaló Bokova.
El Día Internacional de la Lengua Materna fue proclamado por la Conferencia General de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en noviembre de 1999. El cual se ha observado cada año, desde febrero de 2000 para promover la diversidad lingüística y cultural y el multilingüismo.
La fecha representa el día en 1952, cuando estudiantes que se manifestaban por el reconocimiento de su lengua, Bangla, como uno de los dos idiomas nacionales de la entonces Pakistán, fueron muertos a tiros por la policía de Dhaka, la capital de lo que hoy es Bangladesh.
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