Liverpool hunde a Submarino Amarillo y flota en final de Champions

GUADALAJARA, Jal., 3 de mayo de 2022.- Liverpool jugará su décima Final de la Champions League. El sueño de conquistar La Orejona sigue vivo. Este martes, los Reds vivieron 45 minutos complicados y vieron el global igualado, pero con una extraordinaria reacción en la segunda parte, le dieron la vuelta al marcador para vencer por 3-2 al Villarreal (5-2 global). Así, el cuadro británico luchará por el título en París.

Con la desventaja de 0-2 sacada en la Ida, el Submarino Amarillo estaba obligado a ir por la hazaña. Y tuvo un arranque espectacular. Se jugaba apenas el minuto 3, cuando Pervis Estupiñán tomó la redonda por izquierda. Levantó la mirada y lanzó un servicio pasado a segundo poste. Étienne Capoue llegó estirando la pierna para regresar la redonda al centro. En el área chica, Boulaye Dia solamente tuvo que empujar al fondo el tempranero 1-0.

El Estadio de La Cerámica explotó. La ilusión estaba viva. Liverpool sufría para generar con la claridad que suele hacerlo. Al 13’, el cuadro británico presionó y provocó el error, Naby Keïta robó el balón, que quedó suelto fuera del área. Thiago disparó de primero y la bola rozó el travesaño antes de irse del campo. Más tarde, Mohamed Salah filtró para Diogo Jota, pero el arquero Gerónimo Rulli salió rápido para tapar, al 28’.

Villarreal se lanzó al frente de nuevo. Gerard Moreno sacó un tremendo toque filtrado para Giovani Lo Celso, que entró solo frente al arquero Alisson Becker, que salió rápido y adivina hacia donde quería ir. Se tendió en el césped, tapó el balón y arrolló al jugador argentino. Se pedía penal, pero el árbitro dijo que no y el VAR lo respalda en la revisión silenciosa, al minuto 37. Pero el cuadro local ya estaba encima.

Al 40’, vino un trazó largo que alcanzó por derecha Étienne Capoue, controló , recortó ante la floja marca de Andrew Robertson. Levantó un centro pasado a segundo poste. Trent Alexander-Arnold hizo una pésima cobertura, pues se quedó parado en lugar de ir por el balón. El francés Francis Coquelin fue con más ambición por la redonda, se adelantó y ganó por arriba. Colocó el cabezazo para el 2-0.

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