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BRASIL, 28 de enero (Quadratín México).- Cientos de familiares y amigos velaron a por lo menos 231 jóvenes que murieron en la discoteca Kiss luego de un incendio provocado por un espectáculo de fuegos pirotécnicos.
Autoridades del país precisaron el número de muertos luego de que el domingo se manejara una cifra de 233.
Ataúdes, escoltados por centenares de familiares, amigos y allegados, permanecieron hasta la madrugada de este lunes en el Centro Deportivo Municipal, un complejo de gimnasios adonde las autoridades llevaron los cadáveres para identificarlos y que se convirtió en el epicentro de la tragedia.
Parte de los 261 mil habitantes de Santa María, localidad del estado de Río Grande do Sul, en el extremo sur de Brasil, acudió en masa a mostrar su apoyo a las familias, que mantuvieron el duelo entre el llanto y un turbador silencio.
Los féretros portaban letreros a los pies para identificarlos junto con objetos personales de los jóvenes.
Está prevista la celebración de una ceremonia ecuménica, a cargo del obispo Helio Adelar Hubert, a la que seguirán los entierros, que comenzarán a realizarse en el cementerio municipal por la mañana de este lunes.
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