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MÉXICO, 18 de junio de 2015.- Después de siete años de ocurrida la tragedia del News Divine, las 12 víctimas fallecidas el 20 de junio de 2008 tendrán un memorial llamado “Nunca más”, cuyo objetivo es nunca olvidar el operativo policíaco causante de dichas muertes.
Serán las propias instalaciones del News Divine, que se ubicaba en Eduardo Molina 183, en la colonia Nueva Atzacoalco, en la delegación Gustavo A. Madero, las que alberguen a “Nunca más”.
El Memorial tardó siete años en inaugurarse, pese a que era uno de los puntos de la recomendación que la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) ordenó al GDF por su responsabilidad por la tragedia.
Así lo explica a Quadratín Carmen Rivas, madre de Leonardo Amador Rivas, una de las 12 víctimas.
Aunque no hay marcha atrás en la inauguración, a realizarse este sábado 20 de junio, a las 14:00 horas, no significa que los familiares estén conformes.
Rivas, una de las madres con mayor activismo en el caso, aseguró que autoridades del Instituto de la Juventud (Injuve) del DF han mostrado renuencia a la exposición de contenido interactivo donde se informa que hubo responsabilidad de las autoridades del gobierno capitalino en el operativo así como de la Procuraduría de Justicia del DF (PGJDF) en no sancionar a los responsables.
“Los productores anduvieron investigando, preguntando, grabándonos. Pero cuando tocamos que la Procuraduría no investigó bien y por tal motivo la Suprema Corte de Justicia de la Nación [SCJN] exoneró a 11 policías, vemos que el procurador que quedó es el ahora jefe de gobierno, Miguel Ángel Mancera”.
Los familiares pugnan porque se sepa que el operativo policíaco que segó la vida de nueve clientes, dos trabajadores y un policía, fue responsabilidad de las autoridades y que las investigaciones aún no castigan a algunos de los mandos medios que participaron.
“Se va a inaugurar el lugar, los contenidos se presentarán en 15 días porque hay que quitar la verdad que no le conviene”, explica.
Pero en caso de que no cedan las autoridades, entonces los padres pondrán lo que consideran es la verdad en otros lados.
“Si no ponemos la verdad en contenidos interactivos entonces fallamos. Lo que se trata es de recordarle a la gente lo que pasó, por eso es Nunca más”.
UN LARGO CAMINO
Carmen Rivas recuerda que luego de la recomendación de la CDHDF pasó poco más de un año, cuando un día al pasar por el News Divine, ubicado en Eduardo Molina, vio que el entonces director del Instituto de la Juventud del DF, Javier Hidalgo, encabezaba a un grupo de jóvenes que comenzaban a dar de mazazos al lugar, con la intención de derruirlo.
Una de ellas era la hermana de Jennifer, una adolescente que no murió aquel 20 de junio pero tuvo daños físicos irreversibles por el aplastamiento causado por la policía y el arremolinamiento de jóvenes que deseaban salir por la estrecha puerta del lugar esa tarde.
Rivas llamó a papás y a reporteros para avisarles de la situación. Un periodista le preguntó a la hermana de Jennifer por qué quería tirar el lugar y ella respondió que “ya lo pasado era pasado”, recuerda la mamá de Leonardo Amador.
Rivas le reviró y le preguntó si eso se lo había preguntado a su hermana Jennifer. Reconoce que fue grosera, pero así lo sintió esa vez.
También le preguntó al director del Injuve que qué pasaría con las misas que los familiares hacían ahí en honor de sus hijos. La respuesta del funcionario fue: “no todos somos católicos”.
Resulta que Javier Hidalgo buscaba que donde estuvo el News se construyera un galerón al cual acudieran los jóvenes a bailar, sólo que sin bebidas alcohólicas.
La idea no prosperó porque los familiares de las víctimas se opusieron y pasaron cinco años para construir el Memorial, que sólo avanzó hasta que el actual Jefe de Gobierno aceptó apoyar a los padres en sus peticiones, algo que Rivas le reconoce.
“Llegamos a una mesa de diálogo, había cosas que no nos satisfacían, a fin de cuentas los que perdimos fuimos nosotros por responsabilidad de ellos, porque ya la Suprema Corte de Justicia de la Nación [SCJN] o la Procuraduría de Justicia dirán que no son responsables, pero son responsables tres niveles de mandos, los que mandan, los mandos medios y los de abajo”, afirma.
Fue en el sexto aniversario cuando se colocó la primera piedra del Memorial News Divine Nunca Más.
Será este sábado 20 de junio cuando se inaugure el lugar que será interactivo. Los visitantes podrán colocarse audífonos y conocer quiénes y cómo eran las victimas, los resultados de sus exámenes toxicológicos –el operativo policíaco se hizo bajo el argumento de que se vendían bebidas alcohólicas a menores de edad- y lo que ocurrió aquella tarde del fatídico viernes 20 de 2008.
El diferendo sobre los contenidos se debe a oponerse a que la responsabilidad de la muerte de las 12 personas fue de las autoridades y que aún no se sanciona a quienes ocupaban los principales cargos, como el ex jefe delegacional de Gustavo A Madero, Francisco Chiguil, el entonces secretario de Seguridad Pública, Joel Ortega, el ex procurador Rodolfo Félix –cesado por Mancera- e incluso quien era el jefe de Gobierno del DF, Marcelo Ebrard.
Rivas acepta que como jefe de gobierno Mancera ha tenido un trato cercano con los familiares de las víctimas, e incluso les ofreció apoyo para presentar un recurso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), pero siente que si no quieren poner lo que pasó aquel día y la falta de justicia para castigar a los responsables, es para no exhibir al ex procurador, y al secretario de Seguridad Pública, Joel Ortega, ahora director del Metro.
El principal clamor de Rivas y del resto de los padres es justicia, y en su caso no le importa esperar otros siete años, pero ese es su objetivo. Sabe que nada resarcirá la muerte de su hijo, pero si los responsables no son castigados, “entonces lo que ocurrió aquella tarde puede ocurrir otra vez”, prevé.
NO TENGO MIEDO
Rivas dice que la actuación de las autoridades con ella fue tan dura, que ni siquiera le dejaron llorar a su hijo Leonardo, encargado del guardarropa en el News Divine. Dos días después de ocurrida la tragedia, el 22 de junio, se realizó el sepelio a la una de la tarde, y cinco después horas la citaron las autoridades. A partir de ahí comenzó su activismo por buscar justicia.
“Pasé semanas sin dormir, esperaba a mi hijo en la ventana, veía a mi esposo echándose la culpa porque él lo llevó a trabajar y ya no lo vio vivo. Hasta los seis meses me salió eso de ‘cómo voy a vivir sin mi hijo’. Iba como tomada a la Procuraduría y a subprocuraduría de Atención a Víctimas hasta al juzgado. Me pregunté: ¿qué voy a hacer sin mi hijo?”.
La muerte de Leonardo y el operativo que la causó la llevaron a consultar los periódicos en busca de información. Antes no lo hacía, tampoco le importaba quién gobernaba.
“Yo tenía a mi hijo, teníamos nuestros trabajos. Ahora soy muy lépera porque me quitaron lo que más amaba, tengo dos hijos más pero ellos a los 17 o 18 hicieron sus vidas”.
En el caso de Leonardo él le prometía que no se casaría para quedarse con ella. Recuerda que su hijo estuvo seis años enfermo, ella lo cuidó y cuando ya tenía su salud completa, murió en el operativo.
“Cuando estaba bien llegan unos desgraciados y me lo matan”, dice con la rabia contenida y las manos convertidas en puños.
El único miedo que tenía hace siete años era a perder a su hijo, pero ya sin él no tiene miedo a que la sigan, como le llegó a pasar, o a esperar para que se haga justicia.
“No tengo miedo, a lo que tenía miedo es que me tocaran mi hijo, he pasado mucho, a veces nos dejan esperado media hora, una hora… No importa mi hijo ya no me espera, seguimos en la lucha constante, esto no puede seguir así”, finaliza.