Los habitantes, de lo comercial y un guion complejo de terror y thriller

CIUDAD DE MÉXICO, 3 de mayo de 2023.- El director Homero Bueno necesitaba que Los habitantes residieran en lo comercial, para empezar en los largometrajes y un guion complejo que mezclara el terror y suspenso.

Ya con su filme habitando las salas de cine, sin posibilidad de una secuela porque todo se descubre, el realizador reconoce que le gusta mucho el thriller y le gusta el terror, pero este último género no es un cine que aprecie como director o escritor:

O sea, el thriller, por ejemplo, vamos a decir: Los otros, El sexto sentido, todas esas películas con giros dramáticos que te sorprenden y te hacen imaginar cosas y así, esas son las que me gustan mucho, pero yo necesitaba incursionar en el cine con algo comercial, porque no podía entrar haciendo una película dramática.

No podía arriesgarme a hacer algo experimental tampoco; entonces dije: quiero hacer algo comercial para empezar; quiero que la película se vea, quiero algo que me guste, quiero hacer un thriller, pero los thriller en español, específicamente, no son necesariamente un mercado… vamos a decir, muy grande y el terror sí”.

Entonces, cuando escribió el guion estaba destinado a vivir en un thriller, pero cómo lo hacía un poco más comercial… con una mezcla entre géneros, pero todo lo que agregara de terror, tenía que estar directamente relacionado con la trama del filme, donde todo está hilado, porque quería que el texto resaltara, tuviese complejidad, que la gente hablara de los giros de tuerca y no quería simplemente que fuera ¡boo! cada dos minutos.

En Los habitantes moran Jorge Luis Moreno, Jéssica Mendiolea, Estefanía Hinojosa, Sergio Zurita, Bárbara Salmerón y la primera actriz Angélica Aragón, quien, con su personaje de Ramona, es el centro de la cinta, porque ella representa el conflicto central, es la antagonista y sabe perfectamente lo que le pasa a su hijo, Emiliano.

En el momento que aparece ella, le da un giro y se convierte en otra cosa; de hecho, cuando aparece, la película transiciona lentamente hacía otro género, porque estábamos en el terror y vamos hacía el thriller psicológico”, adentra Homero Bueno, vía Zoom.

A cuatro años del accidente que lo habría dejado en coma y al borde de la muerte, Emiliano decide volver a Monterrey a iniciar una nueva vida, pero a las pocas horas de arribar, los siniestros y actuales habitantes de su casa comienzan a hacer de su vida un infierno.

Presupuesto 10 veces menor a lo habitual

Pasaron más de 10 años para que el director volviera a vivir una experiencia en el cine, puesto que debutó en 2010, con el corto Tu dulce voz y Los habitantes respira con un presupuesto modesto, con más de 200 efectos, aunque no complejos, pero todo planificado así desde un principio.

Es una película muy barata: debe de estar alrededor del 10 por ciento o menos de lo que cuesta una película común y corriente aquí, en CDMX; se gastan 30 millones en películas que tienen malos efectos y te digo eso porque acabas de decirme básicamente que es un problema el presupuesto cuando hablamos de efectos en el cine mexicano.

En nuestro caso, intentamos no tener tantos efectos especiales porque sabíamos de antemano que no teníamos dinero para hacer esas cosas; entonces, todo fue truquear traquear, truquear..; aparte de que yo como guionista estaba encaprichado en el ‘no puedo hacer una película sin drama, vacía, de puros sustos y ya’, sino que hiciera sentir cosas, aparte de miedo y que hiciera trabajar el cerebro”, detalla, seguro.

Y Homero Bueno ya empieza a mudarse a otro proyecto, pues está en la preproducción de un drama de época, en lo que quiere especializarse, “lo único parecido con Los habitantes es la estructura o la manera en la que se revelan detalles, porque me gusta jugar con la mente de la audiencia; entonces, también tendrá un giro importante”.