Código infarto, creado por universitaria, salva más vidas
href=»http://mexico.quadratin.com.mx/wp-content/uploads/2013/02/obesidad-infantil.jpg»>CIUDAD DE MÉXICO, 26 de febrero (Quadratín México).- Con la obesidad como principal causa, tal parece que las enfermedades del corazón no tienen freno; en los adultos se incrementan cada día, pero lo más alarmante es que ahora también los menores de edad comienzan a padecerlos.
La Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012 refiere que uno de cada cinco niños en edad escolar es obeso. Otro estudio reciente detalla que chicos de 15 o 16 años con sobrepeso pueden padecer del corazón.
Ante esa alarmante perspectiva de salud, el especialista en bariatría, David Montalvo Castro recomienda a los padres de familia estar pendientes de la alimentación de sus hijos, para lo cual sugiere poner en marcha unos sencillos pasos.
Para empezar, dice hay que deshacerse de la comida que no nutre y ser un modelo a seguir mediante una nutrición sana que incluye el consumo de frutas, verduras, carnes, leguminosas y agua.
Esto porque de acuerdo a las investigaciones, si los padres son obesos, hay un 80 de probabilidades de que los hijos también lo sean. Entonces hay que romper el círculo vicioso, y recordar que los pequeños son el reflejo de lo que ven en casa.
Como segundo paso, el presidente del Colegio Mexicano de Bariatría, Montalvo Castro sugiere relajarse mientras se come; las comidas en familia deben ser divertidas. El disfrute de los alimentos permite al cerebro captar la señal de saciedad antes de comer en exceso.
Hacer de la vida un parque de recreo. Fomentar la actividad es fundamental para perder peso. Sugiere apagar la televisión y llevar a toda la familia afuera y jugar, saltar la cuerda, usar patineta, montar bicicleta o simplemente dar vuelta a la manzana.
Todos esos juegos ayudan a quemar grasa y a mantenerse en forma, a diferencia de los juegos de video que hacen al niño sedentario, además falto de imaginación y sorpresa.
“Un niño obeso es un niño enfermo, a quien se debe atender de inmediato y no esperar a que sea demasiado tarde, pues crecerá como un adolescente obeso”, alerta el especialista en control de peso.
Un niño obesificado, señala, no es responsable de lo que come ni del peso que haya alcanzado.
Se recomienda a los padres que busquen la ayuda profesional que sólo los médicos bariatras pueden ofrecer, siempre con la ayuda de los padres, quienes son los encargados de que en casa se lleve un saludable estilo de vida en familia, considera el bariatra.
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