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CIUDAD DE MÉXICO, 31 de octubre de 2019. — Durante el mes de septiembre del presente año en la Ciudad de México se llevaron a cabo mil 979 inhumaciones de las cuales mil 693 se realizaron en panteones vecinales, generales y de alcaldías y 286 en concesionados, en tanto que en hornos crematorios concesionados por el Gobierno de la Ciudad se registraron mil 917 servicios.
Los datos anteriores ilustran la tendencia registrada los últimos años sobre el destino de los restos de personas fallecidas en la Ciudad de México.
Del total de defunciones en la capital, además de los anteriores un segmento tramita su traslado a otras entidades federativas y otra parte acude a servicios crematorios de instituciones públicas federales.
La Consejería Jurídica y de Servicios Legales, a través de la Dirección General Jurídica y de Estudios Legislativos (DGJyEL), instrumenta y vigila el cumplimiento del Reglamento de Cementerios en los 118 panteones distribuidos en las 16 alcaldías.
De estos, 14 son concesionados, 83 vecinales, 14 de alcaldías, cinco generales y dos históricos.
En el conjunto de cementerios se cuenta con 68 mil 696 fosas disponibles: 4 mil 375 en los concesionados, el resto distribuidas en los vecinales, generales y de alcaldías.
Estamos en presencia de un doble fenómeno: la oferta de fosas en el conjunto de cementerios no ha crecido y las personas han acudido cada vez más a los servicios crematorios.
La Ciudad de México cuenta también con 2 cementerios históricos: el de San Fernando y el Recinto del Cerro del Tepeyac, ubicados en las alcaldías de Cuauhtémoc y Gustavo A. Madero, respectivamente; en ellos se encuentran restos de personas ilustres como Benito Juárez García, Margarita Maza de Juárez, Ignacio Zaragoza, Francisco González Bocanegra y Antonio López de Santa Anna.
El funcionamiento de los cementerios concesionados es supervisado por la DGJyEL, con fundamento en los artículos 28 al 37 del Reglamento de Cementerios de la ciudad.
Una de sus funciones es intervenir, previa autorización de la Secretaría de Salud, en los trámites de traslado, internación, reinhumación, depósito, incineración y exhumación prematura de cadáveres, restos humanos y restos humanos áridos o cremados.
Además, con la intervención de la autoridad sanitaria, coordina con las oficinas de panteones de las alcaldías la entrega de material óseo a las instituciones educativas que le soliciten, y supervisa la osteoteca que se forme en cada una de ellas, en los términos de la Ley General de Salud; asimismo, realiza el trámite de solicitudes para la exhumación y reinhumación de restos humanos.