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BOGOTÁ, 9 de abril (Quadratín México).- El presidente colombiano Juan Manuel Santos encabezó la marcha convocada en respaldo a los diálogos de paz entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que concentra desde temprana hora a miles de personas en las calles de la capital.
El mandatario dijo que la paz debe ser un objetivo sublime porque “nos permitirá pensar en un futuro mejor para nuestros hijos y nietos”.
En su mensaje instó a las fuerzas militares hacer caso omiso a las desinformaciones que han circulado en los últimos días sobre las consecuencias de la paz para la fuerza pública.
“La paz para ustedes es la victoria, eso es lo que vamos a conseguir, la victoria, la paz. Para ustedes buscar una salida pacífica es igual que para todos los colombianos, un paso hacia el progreso y el bienestar”, subrayó.
Centenares de personas se desplazan por las calles de Bogotá en defensa del proceso de paz, la mayoría vestidas de blanco, en una movilización que concluyó al filo del mediodía en la Plaza de Bolívar, en el centro histórico de la capital.
La jornada del 9 de abril, una fecha consagrada como el día nacional de la memoria en la Ley de Víctimas, vigente desde enero de 2012, es una de las más grandes manifestaciones en Bogotá y en otras grandes ciudades del país desde el menos febrero de 2008 cuando millones de colombianos se lanzaron a las calles, dentro y fuera de Colombia, en contra del secuestro y la guerrilla.
La fecha fue escogida en recuerdo del asesinato el 9 de abril de 1948 en las calles del centro de Bogotá del líder liberal Jorge Eliécer Gaitán, lo que generó una oleada de violencia entre sus filas y los conservadores y partió en dos la historia del país, que desde entonces no vive en paz, en medio de la acción de distintos grupos armados ilegales, desde guerrillas hasta paramilitares y el surgimiento de las bandas del narcotráfico.
La marcha, que partió desde siete distintos puntos de la ciudad y debe concluir en la céntrica Plaza de Bolívar, fue convocada por distintos sectores, desde organizaciones de izquierda como Marcha Patriótica hasta grupos no gubernamentales de derechos humanos y el gobierno del presidente Juan Manuel Santos, con el apoyo de distintas instituciones como la Fiscalía General, la Alcaldía de Bogotá y de otros ciudades.
Desde fines de 2012 Santos lleva adelante negociaciones en La Habana con la guerrilla, en el cuarto intento de un gobierno colombiano por acabar con el conflicto con esa organización insurgente, surgida en 1964 y actualmente con unos ocho mil miembros armados.
Santos ha dicho que “más pronto que tarde” espera poder negociar con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), que con unos tres mil integrantes es el segundo grupo insurgente del país.
Aunque ni Santos ni las FARC han dado detalles sobre en qué puntos tienen acuerdos y desacuerdos, los dos bandos sostienen que el diálogo avanza a buen ritmo y han expresado su confianza en alcanzar un acuerdo.
“El conflicto armado no tiene futuro. Llevamos demasiados años derramando sangre”, dijo Santos a The Associated Press durante una parte del recorrido a pie que comenzó en el Monumento de los caídos, ubicado al lado del Ministerio de Defensa y se extendió por unas 40 cuadras hasta un sector del centro de la ciudad.
El proceso en Cuba “es una gran oportunidad para llegar por fin a lograr la paz anhelada”, añadió el mandatario, que tiene previsto más tarde partir hacia la ciudad de Medellín, en el noroeste del país, para otro acto.
“El proceso de paz marcha en la dirección correcta y queremos meterle más el acelerador, por eso se reforzó con la llegada de Catatumbo, sin ninguna duda, eso refuerza que las FARC están comprometidas en este proceso”, aseguró el presidente acompañado por miembros de su gabinete y al menos unas cinco mil personas.
Catatumbo, cuyo nombre real es Jorge Torres Victoria, de 60 años, es uno de los miembros del “secretariado” o máxima jefatura de las FARC y llegó el fin de semana a Cuba para sumarse a la delegación rebelde en la mesa de negociaciones.
Aunque la mayoría de los colombianos apoya la paz, muchos se muestran escépticos y consideran que el problema de la guerrilla -con sus ataques armados- está empeorando, según un sondeo de la firma Gallup divulgado en febrero. La encuesta entrevistó a mil 200 personas en cinco ciudades, del 13 al 20 de febrero, y tuvo un margen de error de tres puntos porcentuales.
Pero “yo siempre he sido cauteloso”, dijo Santos interrogado sobre un final exitoso de las negociaciones. “Nosotros no hemos creído en las FARC por la cantidad de veces que nos han engañado” en pasadas conversaciones, aseguró el jefe de Estado.
La policía calculó que unas 85 mil personas se congreguen en la Plaza de Bolívar y en todo el país participen unas 170 mil personas.
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