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CIUDAD DE MÉXICO, 5 de mayo de 2024.- La mala gestión del gobierno federal durante la pandemia del Covid-19, tuvo consecuencias mortales, con un excedente de 300 mil personas fallecidas que se pudo evitar, si no se hubiera minimizado el uso de la ciencia para enfrentar la emergencia, afirmó el diputado federal Rubén Moreira Valdez.
Las más de 800 mil muertes por covid-19 en México, confirma la irresponsabilidad y estrategia fallida de las autoridades, enfatizó.
En su programa semanal Con Peras, Manzanas y Naranjas y acompañado de la periodista Elena S. Barrios y del economista Mario Di Costanzo, el líder congresista se refirió al informe de la Comisión Independiente de Investigación sobre la Pandemia de Covid-19 en México, que evidencia que la cifra valorada por el gobierno de 500 mil muertes quedó rebasada y pone al descubierto los errores que se cometieron.
El gobierno, aseguró, ocultó información y dejó morir a los más pobres y a los indígenas cuando se dice ser un “gobierno humanista”. Precisó que las gráficas muestran que estos grupos fueron lo que menos pruebas se hicieron contra la enfermedad y en las cuatro oleadas de la pandemia siempre estuvieron en desventaja ante otros grupos de la población.
El coordinador parlamentario del PRI expuso que, en la primera ola, quienes no pertenecían a una comunidad índigena tenían un 30 por ciento más de margen para sobrevivir, mientras en la última oleada, 80 por ciento más de probabilidades de resistir frente a los integrantes de pueblos originarios.
“Hay 300 mil personas que usted señor Gatell mató, porque usted nos dijo que no usáramos el cubrebocas; esto no nos lo dijo un hijo de vecina o alguien ignorante, nos lo dijo usted que no usáramos el cubrebocas, cuando la Organización Mundial de la Salud lo decía. Usted dijo que nos podíamos abrazar”, reclamó Moreira Valdez.
En su intervención, la periodista Elena Barrios explicó que este grupo multidisciplinario de más de 20 especialistas independientes demostró que primero el gobierno intentó centralizar la pandemia con una estrategia que nada tenía que ver con el problema, se desestimó el uso del cubrebocas, se minimizó la gravedad del Covid-19 y una mala entendida austeridad.
Lo más grave, señaló la comunicadora, es que el 25 por ciento del excedente de las 300 mil muertes, correspondió a la Ciudad de México, cuando se sabe que cuenta con los mejores hospitales del país. Agregó que la campaña “Quédate en casa. Quédate vivo”, solo sirvió al gobierno capitalino para matar de manera remota a la gente.
Lamentó que las estadísticas hayan sumado 215 mil niños en situación de orfandad, que la fallida estrategia fue responsables del 40 por ciento de fallecimientos y el 95 por ciento murieron en soledad porque no podían estar en contacto con sus familiares, mientras el sector con menos recursos gastó 74 por ciento más de lo que normalmente destina a medicamentos y atención médica.
En su oportunidad, el economista Mario Di Costanzo criticó que el gobierno tuvo tiempo para prepararse y no lo hizo, no se apegó a la Constitución que establece la creación de una Comisión Sanitaria y le otorga atribuciones para actuar ante la emergencia. Anotó que todo quedó suplantado por el presidente y lo hizo a su manera; cuál fue el resultado, preguntó, una verdadera tragedia en el país, donde todo salió mal y todo falló.