Libros de ayer y hoy/Teresa Gil
Netanyahu: El judío errante
De pronto el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, señalado por reiterados casos de corrupción e investigado por lo mismo, el sábado 28 de enero salió a la palestra y voz en twitter escribió que: “El presidente Trump tiene razón. Yo construí un muro a lo largo de la frontera sur de Israel. Esto detuvo toda inmigración ilegal. Gran éxito. Gran idea”, aseguró el israelí.
El mismo día la Cancillería mexicana entregó una nota a la embajada de Israel en México mostrando su «profunda extrañeza, rechazo y decepción» a lo dicho por Netanyahu horas antes.
Casi se podría decir que la posición del primer ministro israelí es del tipo personal. Hay razones:
La primera de ellas está en que necesita ayuda para solucionar los procedimientos de corrupción que se le siguen en su país y en los que, en casos, están involucrados judíos estadounidenses.
El otro tema es que Netanyahu nunca se llevó bien con Barack Obama durante la gestión del ex presidente de Estados Unidos. Pero además, ocurrió el año pasado que por primera vez, durante reunión en las Naciones Unidas, la representación de EUA votó en contra de Israel en relación con los asentamientos judíos ilegales en Palestina, lo que fue un duro golpe político para el primer ministro judío al que de forma reiterada se ha acusado de violación grave a los derechos humanos.
El twitter que envió Netanyahu respecto del muro ocurre apenas una semana después de que en la Cancillería mexicana se realizó una ceremonia en apoyo al pueblo judío, en conmemoración del Holocausto durante la 2ª Guerra Mundial.
Pero nada, que los problemas de Netanyahu están ahí y quiere el apoyo explícito de Donald J. Trump y de ahí que llame su atención como “amigo solidario”, hasta la ignominia.
Hace semanas, Benjamín Netanyahu fue acusado de corrupción por la Defensoría del Estado de Israel y ha sido interrogado por lo mismo en varias ocasiones.
El caso camina lento porque el encargado de la defensoría del Estado, Avijai Mandelblit es un allegado a Netanyahu y ha obstaculizado el proceso y prohíbe la publicación de los detalles. Aun así la opinión pública allá está indignada y éste ha tenido que ceder muy poco a poco.
La acusación: La policía sospecha que Netanyahu recibió favores y obsequios por valor de cientos de miles de dólares y cuenta con por lo menos 50 testimonios, entre ellos el del empresario judío-estadounidense Ron Lauder, que confirmó a la policía haber dado varios regalos al primer ministro y financiar un viaje al extranjero para su hijo Yair, según informó el diario “Haaretz”.
Así que luego de los interrogatorios y la investigación, a marchas pausadas, la fiscalía decidirá si abre una investigación criminal en la que se le podrían imputar delitos de fraude, ruptura de la confianza y aceptación ilegal de regalos. Asuntos muy graves en Israel: “Todavía no celebren” ha dicho Netanyahu seguro de su influencia interna.
Luego. La policía de Israel informó que el primer ministro Benjamin Netanyahu mantuvo un acuerdo secreto con el dueño de medios israelíes, Arnon Mozes: “Un acuerdo que beneficiaría a ambos, según informó TV Channel 2.
Mozes es dueño del principal periódico israelí Yedioth Ahronoth y otros. Según informó hace unas semanas el periódico Haaretz, el acuerdo se trata de una oferta de ventajas financieras de Netanyahu a Mozes, a cambio de que sus medios mostrasen una buena imagen de él.
Ya antes habían ocurrido hechos en los que se le ha señalado como presunto corrupto. En marzo de 2011 la cadena de televisión Canal 10, expuso que Netanyahu no informó en 2005 de todas las fuentes de financiamiento de su carrera política y que además permitió que empresarios pagaran viajes de él y de su familia. Entre 1997 y 1999 fue investigado durante su primera etapa como primer ministro por supuesto tráfico de influencias.
En todo caso, en 2017 se especula sobre la posibilidad de un tercer interrogatorio al Primer Ministro Netanyahu por el Fiscal General del Estado, Avihai Mandelblit.
Entre los regalos que se mencionan que recibió está el que presuntamente le hizo el productor cinematográfico Arnold Miljan (conocido por haber producido la película Pretty Woman) por unos 105 mil dólares a cambio –se dice ahí- de que Netanyahu ayudaría a Miljan a renovar por 10 años más su visado de trabajo en Estados Unidos haciendo uso de la relación privada que mantiene con políticos de Estados Unidos.
Así que, además de la relación histórica de aliados estratégicos, de apoyo y de inversiones con Estados Unidos, el primer ministro Netanyahu quiere quedar bien con Donald J. Trump para continuar su carrera política, solucionar el problema del voto en Naciones Unidas en contra de los asentamientos irregulares en Palestina y, por supuesto, sus asuntos de presunta corrupción.
Pues este señor nada ‘bien averiguado’ es el que ahora manda un twitt vergonzoso para los judíos de todo el mundo porque, precisamente una personalidad como la de Trump fue la que cometió el Holocausto durante la 2ª. Guerra Mundial en la que murieron millones de judíos.
Por su parte, los judíos en México se han deslindado de esta posición y así en el mismo Israel, que acusan de oportunista a su primer ministro. Y así la historia de este ranchero enamorado que contraviene la gratitud y el honor de su país y de su pueblo. Netanyahu un desvergonzado judío errante, pues.