
Pronostica Kali Uchis a alguien con Sunshine & rain
CIUDAD DE MÉXICO, 5 de mayo de 2023.- Encontrando identificación y un himno por estar “perdido en el corazón/de la grande Babylon/me dicen el clandestino/por no llevar papel”, Home is somewhere else (Mi casa está en otra parte) anima y documenta tres historias, de millones, sobre lo que significa crecer al interior de una familia indocumentada en Estados Unidos.
Carlos Hagerman y Jorge Villalobos documentan en una animación mexicana los testimonios emotivos y reales de Jasmine y su búsqueda de la felicidad (estadounidense de padres mexicanos e indocumentados), Historia de dos hermanas (una ilegal en EU) y Between dos mundos (deportado), con apoyo de Manu Chao.
No es que hayamos dicho: ‘pongamos Clandestino justo porque es pertinente’; cuando platicábamos con Jasmine e Iván (su papá) de lo que les gustaba del uno del otro, de la nada, cantaron esa canción; a Iván le gusta y Jasmine medio la odiaba, pero ya le gusta, porque la canta todo el tiempo, y Carlos y yo nos volteamos a ver, como diciendo: ‘woow, tiene que estar en la película’.
Afortunadamente Manu Chao conoció el proyecto, le gustó, nos decidió apoyar y la prueba es que la canción ya está aquí y es un himno que pareciera que está escrito para esta historia; fue algo, de nuevo, que salió de los protagonistas; es muy mágico”, rememora y externa Villalobos, vía Zoom.
El otro en la charla, Hagerman, añade que lo que fue muy impresionante, es que no habían terminado la película cuando hicieron la petición a Manu, le mandaron simplemente la secuencia de un animatic y entendió perfectamente de qué se trataba.
Y entonces accedió a que pudiéramos tener la posibilidad de pagar esos derechos y ha estado al pendiente. Le hemos manifestado constantemente en qué etapa vamos, pero lo que nos dio mucha seguridad, fue la respuesta pronta y pudimos utilizar la canción”, valora, visiblemente contento.
Dibuja de una forma simple y hermosa la compleja realidad de millones
Home is somewhere else, ganador en IDFA, Festival de La Habana, DocsMx, Zanate y San Diego Latino Film Festival, ya tiene otra casa, en los cines, porque, según Alejandro González Iñárritu, “esta película dibuja de una forma simple y hermosa la compleja realidad de millones”.
Como Hagerman y Villalobos, desde su estudio Brinca, usan la animación justo para hablar de temas sociales, educativos, creando herramientas de comunicación; por ejemplo, para familiares de desaparecidos; entonces, sabían que los dibujos animados, en este caso su documental en 2D, tienen un poder muy muy particular para hablar de este tipo de historias.
Permite crear metáforas visuales, recrear escenas que de otra manera sería imposible tener y sobre todo, es una herramienta que acerca mucho a los jóvenes; nosotros también desde el inicio teníamos la intención de que esta película la vieran audiencias jóvenes y generarles empatía en una edad en la que empiezan como a definir su identidad social.
Creíamos que si generábamos empatía, ayudaría al trato con otras personas que quizá, pasen por este tipo de historias. Así que sabíamos que era el camino perfecto para conectar con las audiencias jóvenes, hacer una experiencia más atractiva y poder, sobre todo, conectar de una manera más emocional, no tanto con datos, contexto y expertos, sino simplemente lo que estas familias nos quisieron contar”, detalla y explica Jorge.
Y Carlos remata que desde un inicio la idea era hacer una película emotiva; es decir, que fuera muy honesta en la manera que los protagonistas cuentan su historia, que el público sintiera cómo es estar en los zapatos de los protagonistas; por ello, está narrada desde su voz y con las conversaciones que tuvieron con ellos, no se escribió un guion y a partir de ahí, se cimentó la base para dibujar y hacer toda la película animada.