MOLINOS DE VIENTO: Estado y desarrollo

18 de diciembre de 2012
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1:15
Roberto Rodríguez

Si Rosario Robles siempre es noticia, su gabinete también lo es, plagado de priistas cercanos a Salinas, a Humberto Moreira y hasta el presidente Peña Nieto, hace notar un sagaz comentarista radiofónico que, seguidamente, pregunta: ¿Y el desarrollo social del país en dónde está?

Se trata de una materia que todo gobernante del DF debe conocer a profundidad, porque en la búsqueda y conservación del bienestar social descansa ese proyecto, de ahí deriva su permanencia. Y eso no carece de importancia en un país donde el heredero del presidente en el gobierno de su estado natal  aumenta en 50% las cuotas a afiliados a la seguridad social, así como en dos años la edad requerida para el retiro laboral.

Peña tiene razón cuando dice que los programas asistenciales constituyen un gasto social necesario. El derecho al desarrollo pasa por la satisfacción de las necesidades primarias de la sociedad. El hambre, por ejemplo. Ir a contracorriente sin más que porque sí es lo que los españoles llaman un sin sentido.

Por cuanto hace a la diversidad de orígenes, colores y sabores de quienes están llegado a las nóminas de Sedesol, ciertamente hiere la sensibilidad sobre de todo de quienes no están en el caso. Rosario es la superviviente de un linchamiento donde la política fue sacrificada a la ineptitud y los rencores de una banda de secuestradores del interés social. Es natural que en su equipo encuentren sitio quienes han pasado por similares circunstancias. También es verdad que en este país los jefes tienen la costumbre mandar e incidentalmente ese podría ser el caso de las incrustaciones de los intereses priístas en uno de los casi 20 despachos auxiliares del ejecutivo federal de un gobierno… priísta. Siempre y cuando el sentido común conserve alguna razón de ser, por supuesto.

El misérrimo 4% de aumento salarial tan aplaudido por el sangriento bufón que acaba de llegar a Harvard, contrasta con el 6.80 de encarecimiento de la comida, donde es válido señalar el contraste del gobierno chiapaneco encabezado por Manuel Velasco Coello  reduciendo en 50% los sueldos de los funcionarios de su gabinete, empezando con el suyo, además de anunciar un plan de austeridad, pues Chiapas tiene una deuda pública de más de 20 mil mdp, según ha informado Elio Henríquez. Peña, por su lado, ordenó disminuir 5% los ingresos mensuales de sus colaboradores en los diferentes despachos del ejecutivo federal.

El español Ángel Carromero, dirigente de las Nuevas Generaciones del PP, condenado en Cuba a 4 años de cárcel por el homicidio de Oswaldo Payá y Harold Cepero, será trasladado a España para cumplir su condena de cuatro años de cárcel. Puede ser que allá lo pongan en libertad faltando al compromiso suscrito. Pero dar de comer a un criminal durante cuatro años en un país cuyos recursos están mermados por el bloqueo de los poderosos que quieren volver a manejarlo como una colonia, sería una sinrazón.

No es lo mismo marchar para reclamar lo que es necesario, lo que es justo, que para chantajear a la sociedad y forzar la complicidad con el régimen. Entre los primeros está la cnte, en el segundo, la decente gente del snte. Ni se puede afianzar con vigencia verdaderamente jurídica la existencia de categorías políticas como las secretarías de Estado en un régimen donde no existen como tales, excepto porque lo dice una trasnochada ley orgánica de la administración pública federal en cuyo artículo 14 se establece: Al frente de cada secretaría habrá un secretario de Estado… esto, cuando el artículo 93 dentro del capítulo tercero del título III de la Constitución General de la República, establece: Los secretarios del despacho… Las patitas en la tierra, por favor.

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QMX/rrb

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