Presenta Ramírez de la O presupuesto de egresos; van 6.5 billones a metas
CIUDAD DE MÉXICO, 4 de junio de 2018.- Ante el embate arancelario del gobierno de Donald Trump y un replanteamiento profundo o posible remoción del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), México tiene una oportunidad histórica para trazar una nueva economía nacional, con el replanteamiento de otra política comercial, coincidieron académicos del Instituto de Investigaciones Económicas (IIEc) de la UNAM.
En un comunicado del IIEc, Gerardo González Chávez, especialista en políticas públicas para el desarrollo y la competitividad, dijo que es la ocasión para modificar la política económica y abocarse al mercado interno.
“México importa de Estados Unidos 60 por ciento de la gasolina y es su principal cliente en materia de alimentos: maíz, frijol, trigo… La autonomía de una nación parte del rubro alimentario y energético, por lo que hay que transformar esa situación”, indicó.
La oportunidad está aquí, para transitar a una verdadera política industrial, expuso Andrés Blancas Neria, experto en política fiscal, monetaria y financiamiento del desarrollo. “Hay que fomentar el crecimiento y desarrollo, no sólo hacer gasto corriente, sino emprender la inversión en grandes proyectos nacionales”.
El investigador del IIEc resaltó que la respuesta arancelaria hecha por Estados Unidos responde originalmente “a la baja de su hegemonía global, pero en particular con el mercado asiático”.
A mediano plazo o más, continuó, los bloqueos comerciales podrían dejar al gobierno de Trump no sólo fuera de los mercados de Asia y Europa, sino con “una tendencia a abandonar la producción para convertirse en una nación importadora”.
¿Hay opciones?
González Chávez apuntó que los tratados buscan, de manera común, reducir los costos de producción y abrir los mercados, pero EU lo hace ahora a la inversa.
“Es importante que México también responda con la misma moneda (con aranceles) como forma compensatoria, pero sería adecuado que esos ingresos se destinen a la producción de lo que no tenemos: energéticos y alimentos”, precisó.
Para José Manuel Márquez Estrada, del área de Análisis Macroeconométrico Prospectivo del IIEc, no hay que temer a dejar la dependencia con Estados Unidos, pues nuestro país tiene una gran posición para diversificar sus relaciones comerciales. “En el caso del acero y del aluminio, que se puede importar a mediano plazo de otros territorios, como Argentina y Brasil”.
Finalmente, José Nabor Cruz Marcelo, del Área de Economía Aplicada del IIEc, dijo que el proteccionismo estadounidense no cederá, y si Trump es reelecto se agudizará; además, están muy cerca las elecciones intermedias en EU, por lo que se debe avanzar en un preacuerdo bilateral, por separado, con Canadá y China”.