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Hallan presunto explosivo en gasolinera de Culiacán
CIUDAD DE MÉXICO, 3 de abril de 2018.- Dos hombres y una mujer creyeron que podían salir impunes de sus fechorías y decidieron atracar a los encargados de una verdulería, un hombre de 51 años de edad y su hijo de 14, sin embargo, fueron descubiertos por un policía auxiliar, lo que desató un enfrentamiento a disparos que derivó en la muerte de un presunto asaltante.
Los hechos ocurrieron al filo de las 19 horas en el cruce de la Calle 7 y 28, de la Colonia El Porvenir, en la Delegación Azcapotzalco, lugar donde se encuentra la verdulería y donde quedó abandonado un auto, en el que presuntamente los asaltantes llegaron para cometer el ilícito.
De acuerdo con las declaraciones de los afectados, los dos hombres y la mujer descendieron de un automóvil Jetta con placas del Estado de Guerrero y a punta de revólver despojaron del dinero de la venta a los encargados.
Justo cuando abordaron la unidad e intentaron escapar, dos elementos de la Policía Auxiliar que se encontraban haciendo un recorrido de vigilancia se percataron del hecho y les marcaron el alto, pero en lugar de entregarse, uno de los sujetos le apuntó a los uniformados con una pistola tipo revólver.
Ello provocó que los uniformados desenfundaran sus armas de cargo, para intentar que los presuntos ladrones se rindieran, pero estos dispararon, por lo que al repeler la agresión, uno de ellos resultó lesionado en la pierna izquierda, sin embargo, aún corrió dos cuadras más hasta que cayó desvanecido, lo cual aprovecharon sus cómplices para escapar.
Por medio de su frecuencia operativa, los uniformados solicitaron una ambulancia, llegando al lugar la número 39 de la Cruz Roja Mexicana, cuyos paramédicos diagnosticaron que el hombre, que no pudo ser identificado en el lugar, ya no contaba con signos vitales.
Por espacio de dos horas, fue acordonado el lugar en espera de la llegada del agente del ministerio público y peritos para que dieran inicio con las indagatorias, lo que llevó a decenas de vecinos a admirar la escena del crimen.
Más tarde, el cadáver fue trasladado al anfiteatro correspondiente para que le fueran practicados los exámenes de rigor y en espera de que alguna persona acuda a reclamar los restos para continuar con las indagatorias.