Muestran albañiles en Catedral y en la Basílica respeto a la Santa Cruz

CIUDAD DE MÉXICO, 3 DE MAYO DE 2017.- Albañiles acudieron la mañana de este 3 de mayo, día de la Santa Cruz, a bendecir sus cruces para mostrar su respeto y fe al máximo símbolo católico, y también para pedir protección y seguridad en las obras en que trabajan.

Uno de los asistentes fue Ángel Hernández, originario de Toluca, estado de México pero que lleva años en la ciudad de México, donde trabaja en obras de construcción. La más reciente es por el Metro Sevilla.

Acompañado de otro trabajador de la construcción, dijo que en la obra trabajan 14 pero sólo acudieron ellos dos, porque el resto se quedó a trabajar. Sobre la cruz de madera que llevan, explicó que significa bendecir la obra y a la gente que ahí trabaja. Enfatizó que debe hacerse con respeto y tradición a la fe, porque si no, “no tiene chiste”.

Después de bendecir la cruz, regresará a la obra, para que a partir de las 2 inicie la fiesta de la Santa Cruz, la cual corresponde pagar al patrón, y en la que espera disfrutar por lo menos “un taquito”.

Además de Ángel, también Lucio Cancino acudió a bendecir la cruz, pero él no lo hizo en la Catedral, sino en la Basílica de Guadalupe, pese a que trabaja precisamente en la catedral, desde la cual salió desde las 10 horas, acompañado de cinco compañeros rumbo a La Villa, a la que llegarán a pie.

Entrevistado por Quadratín, compartió que la caminata durará alrededor de una hora y media, por lo que llegarán a tiempo para la misa programada a las 12 horas, donde bendecirán la cruz y una figura de la virgen de Guadalupe.

Cancino, de 50 años, forma parte de una cuadrilla de 60 trabajadores de la catedral, y para él la cruz es un símbolo del triunfo de Jesucristo, y también de ayuda para fortalecer su trabajo.

De acuerdo al sitio catholic.net ésta tradición data desde la llegada de los primeros evangelizadores a la Nueva España, pues colocaban  cruces en las nuevas construcciones de iglesias, conventos y casas de oración pero los maderos no eran bien vistos por los oriundos del lugar, por lo que prefirieron pintarlas con colores llamativos y adornarlas con flores y listones.

«Esto se sigue haciendo hoy con todo respeto. Cada 3 de mayo, no hay construcción que no tenga fiesta. Todos los trabajadores albañiles, peones, arquitectos, ingenieros conviven en una comida junto con sus familias», detalla el portal religioso.