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GUATEMALA, 12 de enero (Quadratín México).- El presidente de Guatemala, Otto Pérez, denunció hoy que la guerra entre los poderosos cárteles de la droga mexicanos se ha trasladado a su país.
Pérez, quien destacó que su gobierno analiza nuevas estrategias para combatir el narcotráfico, agregó que las mafias de la droga de México libran violentas batallas en territorio guatemalteco para controlar las rutas del traslado de cocaína y otros estupefacientes.
El mandatario guatemalteco especificó que el sanguinario cártel de Los Zetas controlan dos de las tres rutas más importantes del narcotráfico en el país, mientras que están en guerra literalmente por la tercera con el Cártel de Sinaloa, el cual encabeza Joaquín “El Chapo” Guzmán e Ismael “El Mayo” Zambada.
Los dos cárteles mexicanos se han aliado con narcotraficantes guatemaltecos desde hace varios años, pero son ellos (los de México) los responsables de la mayor parte de la violencia, indicó.
Asimismo, Pérez explicó que las corporaciones de justicia de Guatemala realizan trabajos de inteligencia, cuyas conclusiones señalan que las mafias mexicanas están en plena expansión en todo el país centroamericano.
“Incluso”, advirtió, “los narcotraficantes ya han penetrado instituciones como las comisarías de la policía, fiscales y a algunos jueces”.
Y detalló que Los Zetas controlan la ruta del norte, en el departamento de Petén, fronterizo con México, y la de la franja transversal centro-norte, que incluye Quiché, Huehuetenango -también limítrofes-, Alto Verapaz y Zacapa, junto con agrupaciones locales.
En la disputada vía del Pacífico, en el sur, cooperan a su vez el Cártel de Sinaloa y otras organizaciones criminales guatemaltecas.
De acuerdo a investigaciones de inteligencia guatemalteca, Los Zetas, que incursionaron en Guatemala en 2008, con gran dominio en el vasto Petén, reclutaron a militares guatemaltecos retirados del grupo de élite contrainsurgente de los “kaibiles’.
“A los kaibiles los buscaron porque Los Zetas se conformaron con ex militares de México (en la década de 1990) y encontraron allí no sólo una preparación (sino también) disciplina y un entrenamiento militar que les podía ayudar a las actividades ilícitas”, explicó el presidente.
Reveló que los cárteles de México también se han aliado con las violentas pandillas salvadoreñas Mara 18 y Mara Salvatrucha, aunque éstas no actúan como aliados armados.
“Las maras son utilizadas en algunas actividades que interesan a narcotraficantes, como robo de vehículos, sicariato o narcomenudeo, pero una participación directa o un brazo armado no lo tenemos a la vista o confirmado”, comentó el presidente.
Pérez criticó la lucha de Estados Unidos contra las drogas y de hecho acusó al gobierno estadounidense de convertir la zona centroamericana en una región con más violencia que cuando hubo conflictos armados internos.
Además, añadió, no sólo no han controlado el narcotráfico, sino que ahora por Centroamérica pasa el 90 por ciento de la cocaína que va a Estados Unidos.
Es por eso, aseguró, que aunque su propuesta de despenalización fue rechazada de plano por Washington y algunos países de la región, la búsqueda de alternativas está sobre la mesa y, dijo que será abordada en la próxima Asamblea General de la OEA en julio en Antigua, Guatemala.
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