Aprehenden a Marilyn, acusada de psiquiatra falsa
CIUDAD DE MÉXICO, 14 de diciembre de 2018.- Durante todo el año, el fraude a través de medios electrónicos está presente, pero es en la época decembrina cuando este delito aumenta debido al incremento del flujo de dinero por las gratificaciones propias de la temporada.
Los fraudes por medios electrónicos no son tan fáciles de detectar, sin embargo, de acuerdo con Edgar Martínez, director del área de policía Cibernética de la Secretaría de Seguridad Ciudadana capitalina, son las oportunidades las que prenden un foco rojo para ubicar a este tipo de delitos.
Los tipos de fraudes van desde correos con software que permite el robo de datos personales, como cuentas de correo, usuarios y contraseñas bancarias y todo tipo de información confidencial, hasta el abuso de confianza y venta de productos o servicios ficticios.
El uso de los datos personales varía dependiendo del delito que buscan cometer, pues por un lado utilizan los datos bancarios para realizar transacciones bancarias de bajo impacto, con la intención de que pasen inadvertidos para los usuarios, hasta fraudes por varios miles de pesos.
Otro ejemplo son los préstamos de dinero por medio de los cajeros automáticos, pues utilizando esos datos personales, solicitan el dinero y luego lo transfieren a una cuenta distinta, para cuando el cliente advierte de la transacción, el dinero ya fue retirado, por lo que es necesario hacer la reclamación, lo que le da tiempo a los delincuentes de evitar el rastreo.
USO DEL PLÁSTICO
El incremento del delito de robo a transeúnte y cuentahabiente en la temporada decembrina lleva a muchos de los usuarios de cuentas bancarias a pagar todo con la tarjeta bancaria lo que los expone a otro tipo de delitos.
Al entregar el plástico a terceras personas, aunque sea unos segundos, el usuario se expone al robo de los datos de su tarjeta bancaria y pese a los esfuerzos de los bancos por aumentar la seguridad, los delincuentes se las ingenian para obtener los datos.
Hasta hace unos meses, los delincuentes usaban dispositivos casi imperceptibles para hacerse de los datos de la banda magnética de las tarjetas, pero de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), existen métodos nuevos para este tipo de delitos.
Apenas en septiembre pasado, la Condusef emitió una alerta a los comercios acerca de un malware que permite obtener, además de los datos de la cuenta, el PIN del usuario, mismo que se usa como firma electrónica.
De acuerdo con la comisión, los delincuentes se comunican a los establecimientos mercantiles simulando ser empleados de las instituciones bancarias para solicitar acceso remoto a las terminales punto de venta.
Una vez que el establecimiento les da acceso, instalan un malware que permite, a distancia obtener los datos bancarios, mismos que son usados para emitir compras simuladas y hacerse del efectivo.
Entre las quejas de los usuarios a las instituciones bancarias se encuentran las compras en sitios de internet conocidos como Mercado Libre o Amazon por montos bajos, lo que hace que el usuario no lo note.
SITIOS APÓCRIFOS
Una de las recomendaciones que emiten diversos especialistas en seguridad informática para acceder a los portales de instituciones bancarias o de servicios, es revisar si la dirección electrónica se trata de una página segura.
Esto, de acuerdo con los especialistas, es sencillo, únicamente hay que asegurarse que el inicio de la página sea “https”; todos los portales inician con “http”, pero los de servicios e incluso los servidores de correo electrónico usan la “s” al final como candado de protección.
De acuerdo con el Director de Soltec consultores, Juan Carlos Ruiz, empresa dedicada al desarrollo de software para empresas, este detalle puede ser la diferencia entre hacer una transacción segura y entregar los datos a delincuentes cibernéticos.
“Muchas veces los sitios son diseñados exactamente igual a los originales, sin embargo, a la hora de concluir la transacción no da ningún resultado, ya que la única función de estos, es robar los datos bancarios”, señaló.
Para evitar esta situación, los especialistas recomiendan cerciorarse que las transacciones que realizan vía portales de internet se hagan en las páginas con el prefijo “https” o directamente en la sucursal bancaria.
Asimismo, señalaron que se debe evitar caer en correos donde se pide actualizar contraseñas de estos servicios, pues, como lo advierten las mismas sucursales bancarias, no es propio de los bancos enviar correos de este tipo a los usuarios.