Contexto
Gobernar a partir de la mañanera y concretar los proyectos con la consulta popular
Sin lugar a dudas, Andrés Manuel López Obrador comienza a gobernar a partir de su conferencia mañanera dictada a partir de las siete de la mañana luego de concluir su reunión de trabajo con el gabinete de seguridad, para atender el fenómeno de la delincuencia y armar estrategias para abatir los índices delictivos.
Luego viene el otro tema, fundamental, el de la salud pública, que en las últimas semanas, desde enero, ha sido prioritario, debido a que la crisis sanitaria planteada por coronavirus desde que inició el año, desplazó la controversia de la escasez de medicamentos, que duró meses.
Pero por encima de todos los temas, priva el de la pandemia mundial que ha abatido la economía de todos los países, en unos más que en otros, aparejada con la caída de los precios del petróleo por no haber acordado Rusia y Arabia Saudita disminuir la producción del hidrocarburo, que dejó caer en picada las bolsas junto con la depreciación de las monedas, en México el peso, que está por encima de los 24 pesos por dólar. Ahora el aliado de la crisis es la pandemia mundial.
Como si lo anterior no fuera suficiente, surgió el debate generado luego de que se puso en la mesa de discusión la instalación de la empresa cervecera Constellations Brands, que a la fecha lleva 65% de avance en su construcción, luego de que obtuvo de gobiernos anteriores todos los permisos correspondientes.
Se trata de una de las más importantes inversiones que ya se habían amarrado por el gobierno mexicano y el capital extranjero, con la consecuente derrama económica que representa por la generación de miles de empleos para la población de la franja fronteriza, por encima de los corajes de Donald Trump, ya que se prefiere en este caso invertir en México y no en Estados Unidos.
Pero mientras todo iba viento en popa para Constellations Brand, que contaba con las simpatías mayoritarias de la población, sobre todo de la clase trabajadora y del personal altamente capacitado que egresa de las universidades públicas y privadas, además de la anuencia del gobernador Jaime Bonilla, quien apoya el proyecto desde que inició su campaña electoral, se aparece un escollo: la consulta popular, un recurso muy cuestionado que inventó López Obrador.
Para el tabasqueño, lo que decida el “pueblo bueno” está bien, pero la experiencia en las anteriores consultas, que fueron calificadas de fraudulentas, no han sido un freno para llevar a cabo las obras monumentales de la Cuarta Transformación, como el aeropuerto en Santa Lucia, el Tren Maya y la refinería en Dos Bocas, Tabasco.
Así, contra viento y marea, se hecho “lo que diga mi dedito”, como expresa en las mañaneras.
A pesar de las críticas, sus obras avanzan en Santa Lucía, en Tabasco y el Caribe, aunque los pueblos originarios por donde va a pasar el Tren Maya dicen no haber votado a favor en las encuestas que fueron fabricadas para el caso, pero los videos muestran el avance de las mismas todos los días, de lunes a viernes –lo quiere hacer sábado y domingo también- y afirma que ha sido con el apoyo popular, aunque haya poca credibilidad en las consultas populares de cada caso.
Este sábado y domingo se efectuará la correspondiente a la instalación de Constellations Brands, de la que todavía no se sabe a ciencia cierta su destino, aunque el texto impreso en la parte de atrás de la boleta que van a tener todos los ciudadanos, favorecen su instalación. Dice lo siguiente:
‘Situación actual: Constellation Brands es una empresa que actualmente construye una nueva planta en Mexicali que lleva un avance del 65 por ciento. La nueva planta se ubica en el ejido El Choroco, en un terreno de 400 hectáreas, cuenta con los permisos y autorizaciones ambientales y administrativas necesarias para operar.
‘Esta planta cervecera impulsará el desarrollo económico de la región, pues requerirá de bienes y servicios, generará empleos y oportunidades de inversión en Mexicali. La autoridad ambiental de Baja California autorizó a la empresa un límite máximo de 5.8 millones de metros cúbicos anuales de agua, que representan tan sólo el 0.2 por ciento del volumen total de agua en la región.
‘La planta no consumirá agua adicional a la destinada a las hectáreas del distrito de riego en las que se ha instalado. La empresa cederá los derechos de agua de sus hectáreas al organismo operador de Mexicali para registrar el nuevo uso ante Conagua.
‘La empresa ha expresado un compromiso adicional de sustentabilidad con la comunidad de Mexicali para mejorar el aprovechamiento, cuidado y recuperación del agua, así como incrementar la disponibilidad futura para la población.
‘Invertirá 50 millones de pesos anuales durante cuatro años, con el objetivo de recuperar hasta cuatro veces el volumen de agua que tiene autorizado. El agua será para Mexicali’.
Aunque el texto informativo para que los votantes acudan a las urnas con información verídica y fallen a favor de la instalación de la empresa a sabiendas de que están votando para un mayor desarrollo económico de su región, no faltó un mal pensado que el Gobierno federal, a través de la Secretaría de Gobernación está impulsando el voto favorable, pues desconocen o ponen en segundo plano los motivos del reclamo de los que se oponen al proyecto empresarial.
La cuestión de fondo es la falta de confianza en la consulta popular por sus antecedentes de fraude señalados y se considera ésta como otra forma de extorsionar como la cena con los empresarios que colaboran con él en la venta de billetes de la lotería para la rifa del avión presidencial, porque los pone contra las cuerdas, deja ir el activismo, les piden cosas, luego los dejan ganar, juegan perverso, deja que sus tribus se peleen entre ellas, presionan para que le den más al gobierno y cuando ganan validan el método…
Esto propicia que legitima el mecanismo. Al rato va a salir a aprobar cada cosa a punta de consultas si lo hace hoy. Es casi peor que gane la consulta a que pierda porque se da validez al mecanismo.
Alerta para la jefa de Gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum: el alcalde de Coyoacán, Manuel Negrete, ex futbolista de profesión, no sabe que tiene que atender las luminarias de la avenida Delfín Madrigal. Del metro Universidad a la Avenida de la Imán es una boca de lobo.