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CIUDAD DE MÉXICO, 26 de noviembre de 2020.- En otro día histórico más para la 64 Legislatura, tanto Diputados federales como Senadores de la República se encaminan para ser desaforados y así ser imputados y juzgados por traición a la patria, hechos de corrupción, delitos electorales y todos aquellos ilícitos por los que podría ser enjuiciado cualquier ciudadano.
El proyecto de decreto se deriva de una iniciativa que presentaron los coordinadores de todos los Grupos Parlamentarios y adiciona un párrafo tercero al artículo 108 de la Constitución Política para acotar el fuero de legisladores federales, por lo que fue remitido a la Cámara de Diputados para continuar con su proceso legislativo.
El dictamen fue aprobado por la mayoría calificada, es decir, las dos terceras partes de los senadores presentes en el Pleno: 102 votos a favor y uno en contra, de la senadora del PAN, Martha Cecilia Márquez Alvarado.
La propuesta establece supeditar las acciones de todos los servidores públicos que, en ejercicio de sus funciones, incurran en hechos delictivos para ser sujetos de procesos penales ante las autoridades competentes como una medida que pretende reforzar el Estado de derecho.
Al conminar a los senadores votar a favor del dictamen en virtud de la congruencia de los miembros de la Cámara Alta, el coordinador del Grupo Parlamentario de Morena, Ricardo Monreal Ávila, señaló que el fuero debe de ser una medida para que legisladores puedan actuar con solvencia en sus actividades legislativas sin ser perseguidos por las mismas por quienes ostentan el poder Ejecutivo sea estatal o federal.
Sin embargo, se pronunció porque se establezcan nuevas formas de desarrollo de la actividad legislativa con ciertos matices para proteger la actividad legislativa, no siendo una manera para que delincan quienes son representantes populares.
El líder morenista expresó su reconocimiento a los acuerdos entre todos los grupos parlamentarios para destrabar el dictamen de la minuta para el fuero constitucional al Presidente de la República, que previamente se aprobó, también por mayoría calificada.
Del mismo consenso se logró para que el Congreso pueda dar paso al siguiente dictamen del proceso constitucional, y reformar la parte correspondiente a la supresión del fuero de legisladores.