El concierto del músico/Rodrigo Aridjis
Se quiebran las relaciones en el Continente Americano
• Consecuencias agrícolas por el retroceso de EU con Cuba
• ¿A cuál democracia en México se refirió el Canciller Luis Videgaray?
El revés en la política de Estados Unidos con Cuba que recién anunció el presidente Donald Trump es un retroceso porque además de dañar al pueblo cubano, afecta los intereses de los estadounidenses, según expertos.
El abogado estadounidense Robert Muse, quien tiene amplia experiencia en el estudio de las relaciones entre Washington y La Habana, declaró al diario Granma que la resolución de Estados Unidos obedece a la presión ultraderechista de Miami. «Creo que el presidente (Trump) está pagando deudas políticas al senador Marco Rubio y al representante Mario Díaz-Balart», dijo el abogado.
Las acciones de Trump vuelven a frenar la libertad del pueblo estadounidense a viajar libremente y también afecta las negociaciones agrícolas. La agencia Reuters reportó que las exportaciones ascendieron a 221 millones de dólares el año pasado y prohíbe que empresas de EE.UU. hagan negocios con compañías propiedad o controladas por el ejército cubano.
La senadora Amy Klobuchar, de Minnesota, comentó que acabar con el bloqueo hacia Cuba beneficiaría a su estado ya que, por ejemplo, los criadores de pavos «esperan que el crecimiento de los ingresos entre los cubanos conduzca a una mayor demanda de aves de corral estadounidenses. O a los agricultores de todo el medio oeste de EE.UU., que quieren exportar sus cultivos a Cuba».
Tan sólo con fines humanitarios, las empresas estadounidenses exportan cerca de 300 millones de dólares en productos agrícolas cada año, este número se elevaría considerablemente si el embargo comercial se levantara. Lo cual no ayuda, ni a los estadounidenses ni a los cubanos ya que los primeros pierden un mercado de once millones de personas que se encuentra a sólo 144 kilómetros de su territorio.
Trump asegura que pretende acabar con «concesiones unilaterales», a lo que Cuba responde que en 22 acuerdos que sostenía con Estados Unidos, ninguno le favorece exclusivamente. Estos van desde trabajar en conjunto ante un derrame de petróleo en el estrecho de la Florida; combatir la ciberdelincuencia, el terrorismo o el narcotráfico, reforzar la seguridad en la navegación marítima o compartir experiencias en el enfrentamiento al cáncer. Estos acuerdos benefician por igual a ambas naciones.
Sin embargo, las relaciones diplomáticas seguirán, con embajadas en ambas capitales. Y la mayoría de los estadounidenses (73 por ciento) apoya los negocios con Cuba. Así que la obsesión de Donald Trump por eliminar cualquier vestigio de su antecesor no avanzará del todo.
El presidente norteamericano afirma que actúa en favor de los cubanos, sin embargo, según la encuesta Bendixen-Amandi, más del 90 por ciento del pueblo cubano aprobó los acuerdos hechos con el ex presidente Barack Obama.
Por otra parte, pero con el mismo tono, otro dirigente nacional que parece no hacer mucho por su pueblo es el de Venezuela.
Tan preocupante es ya la situación en aquel país, que la reunión 47 de la Organización de los Estados Americanos que se lleva a cabo en Cancún desde este lunes, pretende encontrar la salida a la crisis que vive el pueblo venezolano. Desde el 1 de abril miles de personas han salido a las calles a exigir democracia, pero en respuesta han obtenido represión. Más de 70 personas han perdido la vida de manera violenta.
El encuentro que reúne a cancilleres del Continente pretende seguir las conversaciones del pasado 31 de mayo en Washington, cuando por falta de consenso se tuvo que posponer el encuentro hasta este 19 de junio.
Estados Unidos, México, Perú, Canadá y Panamá rechazaron la Asamblea Nacional Constituyente (ANC), convocada por el presidente Nicolás Maduro, mientras que la Comunidad del Caribe (Caricom) se inclina a una solución interna a la crisis que vive Venezuela.
La canciller venezolana, Delcy Rodríguez sólo permaneció unas cuantas horas para concluir que el espacio no sirvió para el diálogo y que en cambio obedece al chantaje y la presión de América del Norte. Parece que ambos mandatarios, (el de EE.UU y Venezuela) están cortados con la misma tijera, es decir, apenas se sienten criticados y cierran oídos pero en sus declaraciones siempre son las víctimas.
De cualquier manera, la reunión no rindió frutos porque nuevamente por falta de consenso fue un fracaso. Ninguna de las dos declaraciones por crisis en Venezuela obtuvo los 23 votos necesarios. Tampoco ayudó de mucho que casi 14 países, de los 35 que conforman la OEA, reciben petróleo subsidiado de este país en conflicto.
El canciller mexicano, Luis Videgaray se limitó a decir que “aún pueden pasar muchas cosas» de aquí al miércoles. Pero en su discurso mencionó algo que a muchos mexicanos nos confunde: “La OEA nos une y nos convoca porque compartimos principios, porque compartimos valores como la defensa de la democracia, los derechos humanos el desarrollo incluyente y la seguridad en todas sus dimensiones”.
¿A que democracia se refiere? ¿A la que vivieron recientemente más de 19 millones de mexicanos en los comicios de Coahuila y el Estado de México? En las que se registraron amenazas a la ciudadanía, coacción del voto y hasta asesinatos, como el caso de la niña Valeria, cuyo caso indignó a la sociedad.
¿Es esta la “seguridad en todas sus dimensiones” de la que habla el Secretario de Relaciones Exteriores? O se refiere a la seguridad que da el programa espía Pegasus al Gobierno de Enrique Peña Nieto, que da cuenta de los movimientos de periodistas, activistas sociales y defensores de derechos humanos.
En México carecemos de la garantía de nuestros derechos humanos. No solamente los periodistas y activistas son el enemigo. Para el gobierno de Enrique Peña Nieto, los mexicanos que rechazamos sus políticas somos enemigos del Estado.
Desde el centro
Julien Huck, secretario general de la Unión Internacional de Sindicatos de Trabajadores de la Agricultura, Alimentación y el Comercio, -de la Federación Sindical Mundial-, se comprometió a exponer, en la próxima reunión de la Organización Internacional del Trabajo, con sede en Ginebra, Suiza, las precarias condiciones laborales de los jornaleros agrícolas de San Quintín, en Baja California. Invitado por El Frente Auténtico del Campo (FAC), que impulsa una agenda común internacional para defender los derechos de los trabajadores agrícolas y campesinos mexicanos. Los dirigentes de la CODUC, UNTA, CIOAC y MST recorrieron con líderes del Frente Sindical mundial a conocer las violaciones que se cometen a los derechos humanos de los jornaleros agrícolas del país… Según la SAGARPA, en la actual administración se han tecnificado casi 450 mil hectáreas en beneficio de 34 mil, 26 por ciento mujeres, quienes ya cuentan con tierras de riego… Seguirá el calor en el país.
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