Reportan que armados entregan cadáver a paramédicos en Sinaloa
CIUDAD DE MÉXICO, 10 de enero de 2017.- La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) tuvo conocimiento de los hechos registrados el pasado sábado 7 de enero en Rosarito, Baja California, cuando durante el desalojo de manifestantes de la planta de Petróleos Mexicanos, agentes de la Gendarmería golpearon a los periodistas Laura Sánchez Ley y Luis Alonso Pérez, quienes cubrían esos sucesos, y a otros periodistas les rompieron el equipo fotográfico que llevaban.
De acuerdo con un comunicado, personal del Programa de Agravios a Periodistas y Defensores Civiles de Derechos Humanos de este Organismo Nacional sostuvo comunicación con los comunicadores, a quienes ofreció el acompañamiento del personal de la oficina foránea de la CNDH en la ciudad de Tijuana, a fin de presentar la denuncia correspondiente.
Este Organismo Nacional determinó iniciar una queja de oficio y el mismo sábado 7 solicitó medidas cautelares al gobierno de Baja California a fin de implementar la protección y la atención médica necesaria a la y los periodistas lesionados.
De igual manera, y en la misma fecha solicitó medidas cautelares a la Comisión Nacional de Seguridad para que durante los operativos los elementos de la Gendarmería y la Policía Federal se abstengan de agredir a la y los periodistas que resultaron lesionados, y que garantice que quienes cubren las movilizaciones por el incremento en el precio de los combustibles como parte de su labor periodística, puedan hacerlo sin ser agredidos u obstaculizados por servidores públicos de dichas corporaciones.