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CIUDAD DE MÉXICO, 3 de septiembre de 2016.- El presidente de la Comisión Asuntos Frontera Norte de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, Leonardo Amador Rodríguez, señaló que el encuentro del presidente de la República, Enrique Peña Nieto y el candidato republicano al gobierno de los Estados Unidos, Donald Trump, es un acto cuestionable.
Añadió, en un comunicado, que la justificación pública y sus argumentos, no son consecuentes con sus acciones, dijo. Peña Nieto destacó que su “prioridad como presidente es proteger a los mexicanos, abogar por sus derechos, defender su vida y su dignidad en donde quiera que estén”, sin embargo, en materia de políticas públicas, el presidente olvida a los ciudadanos que viven en la frontera norte, subrayó.
En su mensaje, señaló, el presidente Peña Nieto insistió en que “era fundamental poner en su justa dimensión la importancia que tiene México para los Estados Unidos. Que sepa de primera mano que diariamente circulan por la frontera más de un millón de personas y 400 mil vehículos.
“Que el comercio entre ambos países supera los 500 mil millones de dólares al año. Que la economía mexicana está íntimamente relacionada con la estadounidense. Si a los Estados Unidos le va bien, a México le va bien. Estados Unidos exporta más de 200 mil millones de dólares anuales a México y más de seis millones de empleos de estadounidenses dependen de esas exportaciones”
Desafortunadamente, señaló Amador Rodríguez, los ciudadanos que viven en las seis entidades fronterizas de nuestro país padecen una situación muy complicada en materia de competitividad, no existe un programa agresivo en materia de infraestructura, la mala calidad de los servicios por la alta demanda, debido a los flujos de migrantes no se resuelven; los altos niveles de inseguridad y violencia por el tráfico de armas, drogas y la corrupción de las autoridades encargadas de vigilar que no sucedan estas cosas, se olvidan en el diseño de políticas públicas.
Recordó que el Fondo Fronteras creado en el Presupuesto de Egresos de la Federación para 2014, que no existió en 2015 y que en 2017 la SHCP ha dicho que lo eliminará, son elementos suficientes para considerar que el encuentro Peña-Trump tiene una connotación estrictamente propagandística, pues ambos, uno en el discurso y otro en los hechos, afectan directamente a la población que vive en la frontera, que son quienes materializan de forma más ilustrativa lo que significa la relación entre los dos países.
Exhortó respetuosamente al presidente Enrique Peña Nieto, para que, en el ámbito de sus atribuciones, además de sus encuentros personales con quién el desee reunirse, procure en el presupuesto y con acciones en firme, a los ciudadanos que representa en la frontera.
En calidad de presidente de la Comisión de Asuntos Frontera Norte, reprobó las acciones del gobierno mexicano que en el discurso habla de una legítima defensa de relaciones internacionales entre dos países y los posibles representantes populares que pueden encabezar una nación, pero que, en los hechos, termina convalidando un acto poco comprensible, pues recibió a quien antes y después del encuentro, denostó a los mexicanos.
Y enfatizó que a los protocolos deben de acompañarle acciones que tiene el ejecutivo en sus manos. “Las amenazas a los mexicanos” más que los dichos, son los hechos y por eso le solicitamos congruencia al presidente de la república.