Transparencia, el reto de la transición al Inegi y la reforma necesaria
CIUDAD DE MÉXICO, 13 de septiembre de 2018.- Niños y adolescentes de la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim), llegaron a las afueras de la casa de transición de Andrés Manuel López Obrador, presidente electo de México, para pedirle trabaje por los derechos de la juventud en México.
Minutos después de las 10 horas, ocho niños y adolescentes acudieron a la casa de transición al ritmo de mariachi y en medio del caos por el gran número de personas que estaban afuera del domicilio.
Tras una espera de casi media hora en la que el mariachi cantó diversas canciones y los niños y adolescentes expresaron sus exigencias, además de que se respete sus derechos, López Obrador llegó a bordo de su carro entre de gritos de “¡AMLO escúchanos!”.
Lo cual fue en vano ya que el presidente electo entró directo a su oficina, solo indicando que Leticia Ramírez se encargaría de atenderles.
Ante esta circunstancia, Juan Martín Pérez García director ejecutivo de Redim mencionó que «la serenata es forma de recordarle el pacto que firmó el 30 de abril y esto se traduzca en políticas públicas».