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CIUDAD DE MÉXICO, 31 de mayo de 2018.- Ante las altas temperaturas registradas en los últimos días en la mayor parte del país, médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) exhortan a la población a extremar precauciones por golpe de calor, especialmente en lactantes y menores de cuatro años.
El coordinador de Programas Médicos de la División de Medicina Familiar, Arturo Díaz Hernández, señaló que se debe evitar que los niños permanezcan por tiempo prolongado en vehículos, transporte público, lugares cerrados y con poca ventilación, así como mantenerlos con una hidratación abundante.
Por medio de un comunicado, indicó, se debe alejar a bebés y niños menores de cuatro años del ambiente caluroso, ya que un menor incrementa su temperatura corporal de tres a cinco veces más rápido que un adulto, lo que lo hace más vulnerable a presentar un shock térmico.
El golpe de calor o shock térmico, explicó, se define como un aumento en la temperatura corporal, a partir de los 40 grados, que afecta de manera súbita las funciones vitales, ocasionando un estado de deshidratación con pérdida de agua, electrolitos e incluso, que pone en peligro la vida de los pacientes.
En los últimos días una onda de calor ha afectado a la mayor parte del país y se prevé que continúen registrándose temperaturas superiores a los 45 grados en estados como Sinaloa, Michoacán e Hidalgo; de más de 40 grados en la región norte del país; mayores a 35 grados en la región sureste y superiores a los 30 grados en la capital del país.
Ante ello, el especialista del IMSS subrayó que en caso de presentar incremento de temperatura corporal, sed, resequedad en mucosas, boca, mareos, náuseas, aumento en la frecuencia respiratoria y cardiaca, palpitaciones y alteraciones de la conciencia, confusión, somnolencia, desmayos, se acuda inmediatamente al área de Urgencias de su Unidad de Medicina Familiar para ser atendido y evitar complicaciones como daño cerebral, hepático e insuficiencia renal.
Recomendó a las madres de familia que tienen hijos menores de un año, a no dejar de amamantar a sus bebés, ya que la lactancia adecuada disminuye el riesgo de presentar golpe de calor. Asimismo, señaló que no se debe esperar a que los niños pidan agua, pues cuando lo hacen es porque se está iniciando un estado de deshidratación leve.
El doctor Díaz Hernández sugirió además mantener ventilada la casa; usar ropa ligera, holgada y de manga larga, utilizar gorra o sombrero; evitar actividades físicas al aire libre e ingerir muchos líquidos, de preferencia agua simple.