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CIUDAD DE MÉXICO, 4 de octubre de 2020.- La versión de que el virus SARS-CoV-2, causante del Covid 19, tuvo su origen en un mercado en Wuhan, China y habría sido trasmitido de animales infectados a humanos, es un “cuento de niños” sostiene la periodista Cristina Martín.
Lo que hay detrás del nuevo virus, que hasta septiembre registró 34 millones de casos en el mundo y un millón de defunciones, advierte la comunicadora y escritora es una “plandemia” diseñada para establecer un nuevo orden mundial sin necesidad de recurrir a una estrategia armamentista.
En entrevista con Quadratín México, por videoconferencia desde España, la autora de betsellers sobre globalización, considera que todas las naciones de manera forzosa deberán pronunciarse por estar en uno de los dos bloques; el que encabeza China en colaboración con la Organización Mundial de la Salud y grandes inversionistas y en el otro extremo el que representa Estados Unidos al mando de Donald Trump.
“Además, el coronavirus es una arma de control social, porque estamos viendo como en todas las naciones se está imponiendo una vigilancia intrusiva, similar al Gran hermano, un laboratorio vivo como lo llaman en Centro de Dinámica Social del Instituto Tecnológico de Massachusetts, que es donde se ha creado la plandemia, porque se trata de un plan oculto que no es actual sino que viene desarrollándose desde principios del siglo veinte en laboratorios de la elite”.
Categórica, Martín ha investigado por más de diez años la intención de una elite totalitaria que busca imponer un nuevo tipo de sociedad y de costumbres en donde los seres humanos se tendrán que relacionar de manera distante con sus familiares, vecinos y demás habitantes.
En su más reciente libro La verdad de la Pandemia, editado en México por Planeta en agosto de esta año, la comunicadora documenta lo que considera el temor de una elite de inversionistas y gobiernos, representados en el Club Bilderberg ante una inminente “rebelión de las masas”.
-Fue fundado en 1954 en plena Guerra Fría, integrado por las elites de Estados Unidos y europeas, preocupadas por el avance del expansionismo ruso. En cualquier sociedad existen minorías privilegiadas, pero está siempre han sido aislacionistas porque se han mantenido al interior de sus fronteras nacionales, pero ahora salen de estas, y se asocian con elites de otros países.
Esto ha funcionado muy bien, han creado la Unión Europea y el euro, así como de otra gran mentira global como la guerra de Irak…y difunden mentiras en los medios de comunicación para controlar el mundo.
Para los integrantes de Bilderberg, la Unión Europea es un laboratorio de un posible Gobierno Mundial. Y aquí es donde están haciendo los experimentos para implementarlo, donde las elites de los principales países se unan para desarrollar ese tipo de comunismo y dictadura global al que suponen ellos los ciudadanos no podemos revelarnos.
Cristina Martín ha dedicado parte de su trayectoria profesional a investigar a quienes conforman está organización surgida en el siglo pasado y cuya membresía tiene en común que son hombres y mujeres que no actúan por dinero, porque ya lo tienen, “sino por el anhelo de tener un control absoluto de las mentes de todo el planeta”.
En la pagina https://www.bilderbergmeetings.org/background/steering-committee/steering-committee se enuncia quienes forman el comité directivo encargado de organizar las reuniones cada año a las que acuden 130 invitados entre inversionistas, políticos, asesores bursátiles, banqueros, dueños de medios de comunicación, empresarios, directivos de empresas de redes sociales forman parte del conclave de multimillonarios, entre ellos se encuentran Bill y Melinda Gates, (Microsoft) Jeff Bezos (Amazon) y Eric Schmidt (YouTube y Google).
“Ellos se consideran una elite una clase distinta y tiene miedo de que les quiten el poder, como en algún momento enunció el empresario e inversor Warrent Buffet en una entrevista durante el foro de Davos en 2014 ´si hay una guerra de clases, pero es la mía, la de los ricos, la que está haciendo esa guerra y vamos ganando´, recapitula la periodista.
-Después de la Segunda Guerra Mundial se implantaron dos bloques, el capitalista, liderado y representado por Estados Unidos como una opción democrática y liberarla. Por otra parte, el comunismo que simboliza un centralismo manejado por una gran elite que controla todos los movimientos, actividades económicas y derechos fundamentales de los individuos.
Henry Kissinger, (miembro Bilderberg y secretario de Estado en Estados Unidos de 1973 a 1977), es un gran amigo de China, él fue enviado como Secretario de su país a establecer lazos con la nación asiática, de la cual volvió contando a sus jefes los Rockefeller que el modelo chino era el modelo que se debía implantar no solo en Estados Unidos sino en todo el mundo.
Ellos ya tienen una vocación de dominio global, ser el rey de reyes. En este sentido, vemos como con la plandemia nos presentan a China como el gran modelo. China tiene un caos y un colapso sanitario pero gracias a la disciplina de los ciudadanos y la firmeza de su dirigente salen del desorden. Por lo cual esta nación es modelo y el tipo de sociedad que hay que implantar en todo el mundo.
El globalismo es el fenómeno de control de la globalización por parte de esta elite, hace años que vengo diciendo que este es el nuevo totalitarismo. Por ejemplo, recientemente, António Guterres, secretario general de la ONU ha dicho “que nadie quiere un Gobierno mundial, pero que debemos trabajar juntos para mejorar la gobernanza mundial”.
En un mundo interconectado pretenden que la familia de la Organización de la Naciones Unidas, las instituciones financieras internacionales y las supranacionales como la Organización Mundial de la Salud (OMS) sean las que dirijan en mundo.
Con la pandemia, pretender implantar la idea de que los Estados Nación quedan obsoletos y no sirven para dirigir el mundo, por lo cual deben ser sustituidos por estos filántropos y grandes inversionistas que aparecen como salvadores y la OMS que supuestamente están velando por la salud de todos los ciudadanos, lo cual es un simulación.
-Hay dos laboratorios diferentes pero importantes para esta historia. El Laboratorio de Dinámicas Sociales del Instituto Tecnológico de Massachusetts, dirigido por Alex Pentland, el diseñador de la plandemia.
Hay otros laboratorios que son de virus, en donde se apunta el Instituto Virología de Wuhan de donde podría haber salido. Este centro además trabaja en conexión con la Unión Europea y con fondos de inversión internacional. Pues es un laboratorio dedicado a la guerra de tipo militar, con lo cual si el virus salió de ahí, estaríamos hablando de una arma bélica, porque parece que fue modificado de forma genética, como los presume el premio Nobel de Medicina 2008, Luc Montagnier, quien descubrió el VIH, y sostiene que hay elementos de virus que ocasiona el SIDA, en la constitución del SARS-CoV-2.
En los asuntos internacionales, los hechos no ocurren por casualidad y siempre están interconectados, entonces que un virus provoque el hundimiento de las economías y una tensión por la hegemonía mundial tiene más que ver con una acción ensayada y planificada.