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OSLO, 11 octubre (Quadratín México).- México podría tener un segundo Premio Nobel de la Paz mañana, porque de acuerdo a los medios de comunicación de esta capital, el candidato más firme para el galardón internacional es el obispo de la diócesis de Saltillo, Fray Raúl Vera López.
El jerarca católico recibiría el reconocimiento más importante a nivel mundial por su labor en defensa de los derechos humanos, que no sólo prédica en los templos, sino que ha llevado a instancias legales la defensoría de los más vulnerables.
Entre la controversia que ha generado su personalidad que en diversas ocasiones se ha calificado de “radical”, el sacerdote originario de Acámbaro, Guanajuato, ha luchado para que se respete, sobretodo, a las víctimas de la delincuencia organizada, a las familias de las personas desaparecidas, a los migrantes, entre otros.
Por otro lado, ha criticado constantemente las estructuras gubernamentales, los actos de corrupción y decisiones políticas de todos los niveles que afecten a los ciudadanos, incluidas fuerzas policiales municipales, estatales y federales, así como con alcaldes, gobernadores y presidentes.
La diócesis de Saltillo ha declarado que monseñor Vera no emitirá opinión alguna hasta en tanto no se conozco el veredicto final sobre el premio.
Sin embargo, el obispo no sería el primer mexicano en recibir este galardón, pues en 1982 el diplomático Alfonso García Robles lo recibió junto con la sueca Alva Myrdal por sus incansables esfuerzos a favor del desarme nuclear a nivel mundial.
También han recibido el premio en otras categorías, Mario José Molina Henríquez, en 1995 premio Nobel de Química; y Octavio Paz Lozano, premio Nobel de Literatura en 1990.
En la víspera de que se revele quién ganará este distinguido reconocimiento, la cadena NRK de Noruega indicó que el Nobel se concedería este año a un sólo candidato.
En 2011, un trío de mujeres: las liberianas Ellen Johnson Sirleaf y Leymanh Gbowee y la yemení Tawakkol Karman, recibieron el Premio Nobel de la Paz.
La televisora NRK, que raramente se equivoca en sus pronósticos sobre los premios Nobel, inclinó la balanza a favor del obispo mexicano.
Sin embargo, dijo NRK, “es posible que Thorbjoern Jagland (presidente del comité de los Nobel) y el Comité Nobel quieran este año mirar hacia el este”.
En ese caso, el galardón podría recaer en el bielorruso Ales Beliatski, fundador del Centro de Defensa de Derechos Humanos Viasna, encarcelado en Bielorrusia tras un proceso denunciado como “político” por la Unión Europea (UE), o la rusa Liudmila Alexeva, que defiende los mismos derechos desde hace más de 50 años desde que existió la Unión de Repúblicas Soviéticas Socialistas y en la Rusia de hoy.
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