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CIUDAD DE MÉXICO, 28 de noviembre de 2017.- La senadora del PT, Dolores Padierna Luna, manifestó su preocupación ante el avance de última hora que presenta el dictamen que expide la Ley de Seguridad Interior en el Congreso de la Unión, por lo que señaló que la aprobación de esta iniciativa tiene que darse después de un amplio debate.
En conferencia de prensa en el marco de la sesión ordinaria de este martes, la ex perredista se pronunció porque la aprobación de esta propuesta debe darse tras un amplio proceso de consulta con expertos donde participen instancias internacionales en materia de seguridad ciudadana y de derechos humanos, no con negociaciones “en lo obscurito”.
Según promoventes, la Ley de Seguridad Interior no busca militarizar el país, sino más bien daría un marco legal para brindar certeza jurídica a la actuación de las Fuerzas Armadas.
La senadora Padierna Luna criticó que legisladores olvidan sus obligaciones en materia de derechos humanos y desconocen el aumento de la violencia de México a raíz de la intervención del Ejército en las tareas de seguridad pública.
“Ahora se está fraguando en el Congreso de la Unión que en estos últimos días del periodo ordinario de sesiones se apruebe, o más bien, se imponga la Ley de Seguridad Interior que legaliza el aumento de la violencia y la violación sistemática de los derechos humanos”, advirtió la legisladora petista.
Por ello, hizo hincapié en el llamado a revisar antes la actuación de las Fuerzas Armadas, así como evaluar el desempeño en las tareas de seguridad pública por un comité internacional como el de la Cruz Roja.
La iniciativa es de altísima complejidad, pues Dolores Padierna consideró que primero tienen que medirse los alcances de sus contenidos y considerarse los impactos que va a tener en materia de derechos humanos.
“Aprobar sin consultar, sin evaluar previamente no está atendiendo a un reclamo social imperante, no está atendiendo a la conclusión de los expertos que señalan altos riesgos en esta ley”, insistió.
Padierna Luna ve más bien un acuerdo de coyuntura de quienes quieren votarla a bote pronto, pasando por encima de las obligaciones en materia de derechos humanos a nivel internacional que el país ha sellado en tratados internacionales.
“No podemos, no debemos aprobar una legislación tan cuestionada que no brinda la seguridad jurídica de las Fuerzas Armadas, que está condicionada a negociaciones de espaldas a la sociedad”, reclamó al asegurar que la legislación legitima las violaciones a los derechos y advertir que insertará a México en el listado de los peores regímenes autoritarios en el mundo.