Preocupante, recorte de presupuesto para Guerrero: Lluvia Flores

CIUDAD DE MÉXICO, 18 de octubre de 2016.- Las declaraciones del gobernador Héctor Astudillo Flores, en torno a la necesidad imperiosa de modificar el presupuesto para Guerrero el año entrante, son muy preocupantes, pues de no hacerse esto, como él dice, la entidad enfrentará “conflictos y escasez de dinero”, advirtió Lluvia Flores Sonduk, diputada federal del PRD.

La legisladora dijo, según un comunicado, que las afirmaciones del mandatario estatal son un llamado claro a los diputados del Partido Revolucionario Institucional (PRI) para que atiendan las necesidades de Guerrero y su población, y se atreva a decirle “no” a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y modifiquen el presupuesto.

Flores Sonduk recordó que recientemente hizo un llamado a los diputados federales de Guerrero a tomarle la palabra al gobernador Astudillo Flores para «alistar una batalla legislativa oportuna pero firme”, porque “no es conveniente disminuirle recursos” a esa entidad, como ha había señalado el mandatario estatal.

Consideró que es importante que los legisladores guerrerenses, sin importar el partido al que pertenezcan, se sienten a revisar el presupuesto y dar una ardua batalla para hacer llegar más recursos porque de los contrario, “efectivamente vamos a seguir enfrentando conflictos de diversa índole, aún mayor y más preocupantes, y nada sencillos”.

La legisladora comentó que se necesita sí, sensibilidad y solidaridad con Guerrero por parte de la federación y que los legisladores demos una ardua pelea, por lo que llamó a sus pares del PRI a que “se atrevan a decirle no al gobierno y a revelarse, y no al final atiendan las órdenes que les lleguen desde Los Pinos.

Reiteró su convocatoria de rechazar la propuesta que plantea una reducción superior a los dos mil millones de pesos para Guerrero, porque de lo contrario, “estaríamos atentado contra el bienestar de la población”.

Insistió que el Grupo parlamentario del PRD no va a votar a favor de un paquete que no prioriza el crecimiento económico ni impulsa la inversión y que, al mismo tiempo, golpea fuertemente al sector social.