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SAN DIEGO, 30 de octubre (Quadratín México).- El gobernador de California, Jerrry Brown, ordenó a la Guardia Nacional en el estado que amplié su ayuda a los damnificados por el huracán Sandy, que azotó la costa este de Estados Unidos con vientos de más de 100 kilómetros por hora.
Brown también ordenó a la Administración de Emergencias coordinarse con sus contrapartes en la zona devastada para enviar ayuda.
El huracán Sandy causó la muerte de 17 personas en Estados Unidos y dejó a unos siete millones de hogares y negocios sin energía eléctrica, según cifras preliminares.
Hasta la mañana del martes habían partido de California a la zona devastada un Hércules, un C-17, un C-130 y dos helicópteros con brigadas especializadas de rescate.
La administración de emergencias estatal formó y envió por su parte dos equipos de especialistas en búsqueda y rescate de personas con personal de San Diego, Orange, Los Ángeles y Sacramento.
Autoridades estatales también se coordinan con las tres empresas generadoras y distribuidoras de electricidad en California para formar equipos que ayudarán a restablecer el suministro eléctrico a más de siete millones de usuarios en el noreste estadunidense.
En San Diego, una filial de la empresa Sempra informó que tenía listo un equipo de 40 empleados especialistas, mientras que las compañías Pacific Gas and Electric y Edison, también se alistan para ayudar.
La coordinación de California depende de la Administración federal de Emergencias (FEMA) que nombró a un coordinador para asistencia por Sandy.
La Guardia Aérea de California informó en un comunicado que tiene reunido un equipo con 100 efectivos de la 129 Brigada de Rescate Aéreo para transportarse a la zona devastada.
Informó que los militares están capacitados para salvar personas y asistir con la reconstrucción de la zona en desastre.
El coordinador de emergencias de la Cruz Roja estadundiense en San Diego, Andy McKellar, dijo que decenas de voluntarios están a la espera de que la tormenta pierda fuerza para viajar a reforzar la ayuda.
Algunos voluntarios lograron viajar a la zona afectada antes de que Sandy azotara el noreste del país.
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