Cae El Cholo Palacios, presunto jefe de plaza de Guerreros Unidos
CIUDAD DE MÉXICO, 26 de marzo de 2018.- La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) llevó a cabo una inspección al Zoológico Nicolás Bravo, ubicado en el municipio de Tulancingo, Hidalgo, en seguimiento al ataque ocurrido el pasado 17 de marzo de 2018, en el que un felino provocó la muerte a un empleado del lugar.
En atención a información difundida en diversos medios de comunicación, donde se aseguraba que en el lugar se maltrata a los animales y existe negligencia en el manejo de los ejemplares, así como de alguna otra situación irregular relacionada con el cumplimiento de la Ley General de Vida Silvestre (LGVS), inspectores de la Profepa realizaron visita de inspección al Parque Zoológico Nicolás Bravo, con número de registro INE/CITES/DGVS-ZOO-E-0004-01-HGO., ubicado en Calle Pleasenton S/N, Colonia Lindavista, Tulancingo de Bravo, Estado de Hidalgo.
En la diligencia, el responsable técnico del lugar explicó los pormenores del accidente, manifestando que la persona que falleció, realizaba la limpieza del recinto donde se albergan los felinos, el cual se compone de un área de cuarto de noche de 2.25 metros de ancho por 6.10 metros de largo, 3.10 metros de alto; y área de exhibición de 14.40 metros de ancho por 6.10 metros de largo por 3.10 metros de alto.
El personal de la Profepa verificó que dicha zona está construida a base de material de fierro y malla ciclónica, tiene una puerta de guillotina que divide las dos áreas; y que cada una de ellas tiene doble puerta de acceso.
En dicha zona se encuentra dos ejemplares, un león africano (Panthera leo) macho y una hembra; observando que el encierro se encuentra en buenas condiciones, es decir, no presenta aberturas u orificios que puedan ocasionar la fuga de los felinos, y la guillotina funciona correctamente al igual que las puertas de acceso.
Se constató que el encierro se encuentra limpio y los animales en buenas condiciones de carnes, con pelaje brillante y sin laceraciones; concluyendo que no se observan faltas al trato digno y respetuoso.
También se registró que el Zoológico cuenta con el equipo de contingencia, haciendo notar que el día de lo sucedido se utilizaron dardos tranquilizantes; sin embargo, no fueron suficientes para ahuyentar al felino y evitar la muerte del trabajador.
De igual forma, los inspectores federales verificaron el sistema de marcaje de los dos ejemplares, mismos que corresponden a los números: AVID*008*349*365 y AVID*008*351*599.
De acuerdo a lo observado por los inspectores, el incidente pudo deberse a un error humano, es decir, a la falta de precaución del cuidador que presuntamente olvidó cerrar desde el exterior la compuerta o guillotina que separa la sección donde se les dan los alimentos a los animales del resto de la jaula.