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Por Moisés Sánchez Limón
CIUDAD DE MÉXICO, 25 de febrero (Quadratín México).- Aún no mengua la pena ajena con la pléyade artística y cultural que se benefició del gasto público durante la gestión de Consuelo Sáizar Guerrero en el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), cuando el PRD en la Cámara de Diputados propuso al nuevo presidente del organismo, Rafael Tovar y de Teresa, integrar un grupo de trabajo que revise el lodazal encontrado en dicho ente federal.
Y es que la semana pasada, el auditor Superior de la Federación, Juan Manuel Portal Martínez, en el informe que rindió a la Cámara de Diputados respecto de la Cuenta Pública de 2011, en el rubro del gasto ejercido por el Conaculta denunció la existencia de áreas de opacidad que, en buen romance, implica ausencia de comprobación y demostración de gastos por varios millones de pesos.
Sin duda, como en otras dependencia y gobiernos estatales y municipales y entes que ejercen recursos federales, ningún funcionario está exento de incurrir en alguna irregularidad, pero en el informe de la ASF, que es el organismo coadyuvante de la Cámara de Diputados en la revisión de la Cuenta Pública sin injerencias partidistas ni políticas, relacionado con el Conaculta las irregularidades fueron múltiples y realizadas con absoluta manga ancha, en apuesta a la impunidad.
El mugrero es de tal naturaleza que el informe alude a un pasivo presupuestal de mil 187 millones de pesos en el ejercicio fiscal de 2011, que no tienen soporte de comprobación, amén de que el organismo redujo en ese penúltimo año del sexenio calderonista en 74 por ciento sus actividades artísticas y culturales, en relación con el año inmediato anterior.
Vaya, conforme con el informe del auditor, de 354 mil actividades realizadas en cuestiones artísticas y culturales en 2010, sólo se realizaron 92 mil en el año siguiente, 2011, pero el gasto no se redujo. Al contrario, incluso se incumplió con las disposiciones normativas aplicables a la política de impulso al desarrollo cultural.
Los dineros públicos destinados al Conaculta, siempre de acuerdo con el informe de la ASF, se manejaron con tal manga ancha –indudablemente con el visto bueno de doña Consuelo Sáizar—que no hubo licitación de contratos y, por lo menos los que requirieron de cobertura por 31 millones 951 mil pesos, la mayoría de los destinados para obras, de artistas y actos, se adjudicaron directamente.
Un exceso de opacidad implica el hecho de que, pese a la reducción de actividades, cuando se anunciaron los proyectos de remodelación de la Ciudadela, los Estudios Churubusco y la Cineteca Nacional, el gasto fuer 11.1 por ciento superior al aprobado, es decir, se gastaron mil 607 millones 46 mil pesos por encima de los mil 446 millones 474 mil pesos autorizados.
Conforme con el informe de la ASF no hubo control de gastos, se incurrió en deficiencias de planeación y de presupuestación de servicios. Fue como abrir la cartera y pagar lo que se requería sin recibo, o para favorecer a prestadores de servicios, en el mejor de los casos, como ocurrió con 34 millones 62 mil pesos que se pagaron a 22 cuentas bancarias.
PROPUESTA DEL PRD A TOVAR Y DE TERESA
El tema fue tratado en una reunión sostenida entre integrantes de la Comisión de Cultura y Cinematografía de la Cámara de Diputados con el nuevo presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Rafael Tovar y de Teresa.
En el encuentro, el diputado federal perredista Carlos Reyes Gámiz –vocero de la bancada del PRD en la Cámara baja y secretario de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción de éste órgano legislativo—propuso crear un grupo de trabajo para revisar el lodazal dejado en el Conaculta por la administración saliente encabezada por Consuelo Sáizar.
Reyes Gámiz consideró imperativo revisar las conclusiones de la ASF, plasmadas en el Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2011, en el rubro de Promoción y Difusión de la Cultura, es decir, el Conaculta.
Y aunque lamentó que Tovar y de Teresa no haya hecho compromisos concreto con los diputados federales, manifestó al funcionario que el PRD “no cejará en sus esfuerzos por transparentar el manejo de los recursos destinados al sector de la cultura, tan fundamental para la vida del país, y en la medida en que cuidemos y preservemos los recursos públicos que a él se le destinen, estaremos asumiendo nuestra responsabilidad como diputados y funcionarios”.
Por ello, expuso al presidente del Conaculta su preocupación por cuanto a que en el informe del auditor se anota señalamientos “bastantes graves en violaciones flagrantes a la normatividad y procedimientos de dependencias culturales, que no es materia de su administración, sino de la saliente”.
Pero consideró que es responsabilidad de Rafael Tovar y de Teresa tomar cartas en el asunto porque, adujo, “creo que a nadie conviene iniciar una gestión con esos señalamientos tan gravosos, sino además preparar, tal y como usted lo propuso, algún modelo organizacional que permita que los recursos extraordinarios que la Cámara de Diputados aprobó en materia de cultura, tengan un buen fin, que se ejerzan bien”.
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