Trastorno Afectivo Estacional: Estrategias de Atención en el IMSS
CIUDAD DE MÉXICO, 12 de octubre de 2023.- En México, 8 de cada 10 alumnos de primaria reprueban los exámenes de aprendizaje por problemas de la vista y, en el caso de niños indígenas, la proporción es de 9 de cada 10, según la Fundación Devlyn, por lo que en el marco del Día Mundial de la Visión 2023, la Sociedad Iberoamericana de Optometría (Sibopto) propone incluir el Certificado de Salud Visual como parte de los requisitos que la SEP establece para la inscripción de los estudiantes a nivel básico y medio.
Según el INEGI, la matrícula estudiantil en el país supera los 25 millones de niños y adolescentes tan sólo en educación básica, por lo que podría considerarse como un problema de salud pública.
De acuerdo con un comunicado, Francisco Paz, consejero presidente de Sibopto, explicó que en nuestro país, más del 43% de la población necesita anteojos; este índice se eleva al 70% en lugares con alta marginación y pobreza, por lo que resulta imperativo promover acciones tanto de prevención y detección, como de tratamiento o rehabilitación.
“En el país hay más de 60 millones de casos de personas que presentan algún error refractivo, es decir, miopía, astigmatismo o hipermetropía, lo cual equivale a que la mitad de la población necesita lentes, pero sólo 15 millones los utilizan y se desconoce si lo hacen correctamente.
“Sumado a ello, es importante mencionar que en nuestro país, las 2 principales enfermedades crónico degenerativas –Diabetes e Hipertensión– son factores de riesgo para desarrollar ceguera irreversible en adultos mayores. Lo más preocupante es que a pesar de ser un problema de salud pública, no existe en el país una estrategia pública o privada que se enfoque en prevenir, detectar o atender estos casos”, puntualizó Paz.
De acuerdo con el Informe Mundial Sobre la Visión, publicado en 2020 por la Organización Mundial de la Salud (OMS), existe un alto riesgo de que los niños con deficiencia precoz grave, desarrollen algún tipo de retraso en el desarrollo motor, lingüístico, emocional, social y cognitivo, mientras que los niños en edad escolar que tienen deficiencia visual pueden experimentar bajos niveles de logros educativos y autoestima.
Asimismo, el informe prevé que al igual que en poblaciones adultas, el número de niños y adolescentes que padecen errores de refracción, particularmente miopía, aumentará en 200 millones en las próximas décadas, con incrementos mucho más marcados en poblaciones con rápida transición económica, lo que provocaría un impacto mayor en los servicios de atención ocular.
De ahí que Sibopto se suma a los llamados de la OMS a establecer mejores estrategias de atención ocular, así como campañas de prevención, detección oportuna y tratamiento, con el objetivo de fomentar el cuidado de la salud visual, así como asegurar una mejor distribución geográfica de profesionales capacitados para atenderla, todo lo cual se circunscribe dentro de la responsabilidad del Estado de garantizar el derecho a la salud de las personas.
“Nuestra propuesta de hacer obligatorio el Certificado de Salud Visual, así como lo es hoy el Certificado Médico, tiene como objetivo detectar a tiempo aquellos defectos visuales que impiden a un niño o preadolescente recibir en óptimas condiciones su educación escolar.
“En Sibopto estamos convencidos de que si detectamos a tiempo y a temprana edad aquellos errores refractivos que afectan la visión de la niñez mexicana, se pueden solucionar con éxito, brindándole así la oportunidad de recibir su educación escolar en óptimas condiciones”, destacó.