Libros de ayer y hoy
La historia de Maximiliano Cortázar, “Max” para sus cuates, es harto peculiar.
Actualmente se desempeña como diputado federal, plurinominal porque nadie votó por él, y lo es por obra y gracia de sus amigos, Felipe Calderón y Margarita Zavala, quienes todavía viven en Los Pinos.
Vida peculiar porque de baterista del grupo “Timbiriche” llegó a ser uno de los más ineficaces e ineficientes “comunicadores” de la Presidencia de la República. La debacle del PAN en el proceso electoral se debió, primordialmente, a un problema de falta de comunicación.
Nunca supo comunicar los logros del gobierno calderonista; nunca supo posicionar el combate al narcotráfico, que derivó en “la guerra de Calderón”. Nadie en la población supo el qué y el cómo de los sentimientos del gobierno federal. Por eso nadie creyó en Josefina. Por eso se fueron al sótano.
Fue ineficaz, fue ineficiente, lo seguirá siendo ya que eso no se quita con nada, ni siendo diputado federal por “dedazo” ni llegando a la Cámara y asumirse como vocero y despedir de manera procaz, insolente y burda a todo el personal que laboraba en el área de comunicación social.
Incluso a quien fuera su secretario particular en Los Pinos, lo ha instalado con el carácter de responsable de Comunicación Social de la bancada albiazul. ¿Usted sabe su nombre? Nosotros tampoco, porque ha sido tan gris, que ahora ascendió a gris Oxford.
Si están en tercer lugar, en la Cámara seguro que llegarán al sexto. Los reporteros de la fuente legislativa no son igual a los que cubren Presidencia, quienes trabajan pastoreados, sin margen de maniobra y bajo el ojo clínico y conducción del Estado Mayor Presidencial.
Max, como le dicen sus amigos, ya está instalado en la Cámara, y ahora es otro; ya casi nadie reconoce al jovenzuelo que vagaba por las calles de la acomodada colonia Las Aguilas con los bolsillos vacíos, lo cual por supuesto, no es ningún delito, al contrario.
Lo grave es llegar a puestos o lugares que no corresponden a inteligencia, conocimientos o habilidades, eso es lo criticable, por los resultados tan vergonzosos y los premios inmerecidos.
Una nota de la revista Proceso firmada por Alvaro Delgado dice que Maximiliano Cortázar Lara, amigo de Calderón y de Margarita Zavala desde hace dos décadas, vivió en casa ajena toda su vida en Las Águilas, pero en mayo de 2009 se mudó a una residencia de mil 312 metros cuadrados en Jardines del Pedregal. El costo: 7 millones 430 mil pesos.
Actualmente es propietario también de la empresa MXC Consultores, dedicada al análisis de medios, redes sociales, campañas políticas, producción y marketing. Clientes, no le faltan.
Sí, hay músicos con mucha suerte, ni duda cabe.
Yaaaaaa llegoooo, la banda. (Tararear a ritmo Timbiriche)
***
El “ebrardazo”
Y ya que hablamos de panistas tenemos el caso de la diputada Priscila Vera Hernández, quien arrancó a tambor batiente y se fajó las enaguas en contra de las arbitrarias medidas de despedida que quiere aplicar el “carnal” Marcelo.
Señala que como preámbulo a las despedidas que ya se organiza, el gobierno del Distrito Federal, con el contubernio de algunos delegados, aplican aumentos a los impuestos, pero especialmente al predial.
También afirma que la ola de quejas de miles de afectados es creciente y el Partido Acción Nacional abanderará ante las autoridades este clamor para que se impida este “sabadazo” sexenal del gobierno del DF.
Se puso al frente de sus representados y ya organiza la defensa ciudadana en contra de los abusos de la autoridad mediante diversos mecanismos de denuncia.
¡Una de cal, por las que van de arena!
***
Más de legisladores
Nos seguimos regodeando con el Reporte Legislativo de Luis Carlos Ugalde, de Integralia. Ahora con esta perla sobre las intervenciones de los grupos parlamentarios en el Congreso, que a la letra dice:
El mayor contraste del activismo político entre ambas cámaras se observa en el uso de la tribuna:
Mientras que los senadores la usaron en 3,553 ocasiones, los diputados lo hicieron en 11,624, eso es, tres veces más.
En la Cámara de Diputados destaca el Partido del Trabajo (PT), que con sólo 13 integrantes fue el grupo parlamentario que más usó la tribuna, con un total de 3,140 veces, equivalentes al 27 por ciento del total.
Eso explicaría un poco los shows de los noroñas y anexas.
Tanto pujar para no hacer nada. ¡Uf!
***
Nos leemos el lunes
***
QUADRATINAZOS… El baterista consentido – Al Momento Noticias.