Genio y figura
Si Marcelo Ebrard ya se va a dedicar de lleno a buscar ser candidato presidencial en el 2018, tendrá que aclarar de dónde va a sacar los millones de pesos que cuesta mantener un equipo de trabajo que por pequeño que sea come, viste, calza y mantiene a su familia.
Así comienza su reflexión de hoy 19 de septiembre nuestro amigo Pedro Jiménez en su Diario Legislativo, y tiene toda la razón, por eso reproducimos lo que nos dice en su columna. Sigue así:
Todos sabemos que el peje López Obrador tuvo el apoyo de diputados, senadores, asambleístas, gobiernos estatales y hasta del propio Marcelo Ebrard, además del PRD, PT y Convergencia, que pusieron el dinero para mantenerlo los seis años que duro su campaña, primero como presidente legítimo y luego como aspirante, de nuevo, a la silla grande. Pero hasta ahora no se ve que Marcelo Ebrard tenga la promesa de este tipo de apoyo económico.
Claro que podría ser que Marcelo haya hecho un cochinito lo suficientemente gordo, a su paso por la jefatura de Gobierno del Distrito federal, paran poder sostener esos gastos ahora que ya no cobrará sueldo y tampoco tendrá acceso a los diezmos.
Tal vez por eso en sus dos informes de despedida, unió en al sede de la ALDF y el otro en el Auditorio Nacional, no tuvo lleno total, pues no es o mismo pagar el acarreo que atraerlo con simpatía.
Por lo menos ayer en el Auditorio, sus organizadores sufrieron para llenar los grandes huecos que dejaron los cientos de invitados que tuvieron algo más importante que hacer.
Pero por lo que se ve, y al menos hasta ahora, su ahijado, Miguel Angel Mancera, le guarda lealtad y hasta anuncia que no va a competir con él por la candidatura presidencial de las izquierdas.
Claro que eso dice ahora que no ha sumi9do el cargo, pero en cuanto siente la inyección der vitamina P que recibirá el 5 de diciembre, segurito que va a cambiar de parecer. Y es que si López Obrador decía en los albores de su sexenio como Jefe de Gobierno, “que lo dieran por muerto”, lo menos que se puede esperar de Mancera es que le guarde un poco de lealtad a quien le debe el 99 por ciento del cargo, pero ya veremos después del 2015.
Así es, ya veremos, seis años son muchos…
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Hoy son 27 años
Cómo olvidar que hoy se cumplen 27 años del terremoto de 1985, que devastó gran parte de los inmuebles de la zona centro de la Ciudad de México.
Si bien es cierto que este triste acontecimiento hizo nacer la cultura de la protección civil en nuestro país, también es cierto que falta mucho camino por recorrer en este tan importante tema.
Por ello la diputada Priscila Vera, del Partido Acción Nacional, explicó, por ejemplo, que la Ley de Protección Civil adolece de muchas carencias, no solo en materia técnica, sino en la aplicación y vigilancia de su cumplimiento.
Dice también que las Delegaciones Políticas de nuestra ciudad no han cumplido, a la fecha (después de 27 años), con la elaboración y, su consecuente, publicación de los atlas de riesgo delegacionales; por lo que advirtió que prevalecen riesgos añejos, tales como deterioro de inmuebles y efectos nocivos en la salud de los habitantes.
Citó el caso de las colonias Prado Churubusco y Campestre Churubusco, de la Delegación Coyoacán; en esta última, recordó el PAN, se desplomó por completo el edificio, donde se encontraba la Universidad Iberoamericana.
Mientras tanto, hoy a las 10:00 horas habrá un macrosimulacro en donde todos debemos participar.
Quienes vivimos ese acontecimiento y seguimos aquí, no podemos hacernos de la vista gorda.
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Nos leemos el viernes
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