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CIUDAD DE MÉXICO, 17 de julio de 2024.- El titular del Ejecutivo Federal remitió al Senado de la República el Convenio 176 sobre Seguridad y Salud en las Minas, adoptado en Ginebra el 22 de junio de 1995, para su dictamen y eventual ratificación en el Pleno, con la finalidad de continuar con los trámites conducentes para su entrada en vigor.
De acuerdo al documento publicado por la Comisión Permanente, la vinculación de México al citado Convenio 176 contribuirá a evitar muertes por enfermedades y accidentes profesionales; entre otros, como el ocurrido en la mina de Pasta de Conchos el 19 de febrero de 2006, en el que 65 mineros perdieron la vida y 11 más resultaron heridos por las deplorables condiciones en las que laboraban.
Además, la ratificación del Convenio 176 coadyuvará a alcanzar los objetivos establecidos en el Plan Nacional de Desarrollo 2019-2024, específicamente con el apartado Política Social, así como a los fines establecidos en el Programa Sectorial de Trabajo y Previsión Social, específicamente para dignificar el trabajo y estimular la productividad mediante la vigilancia al cumplimiento de la normativa laboral.
El documento puntualiza que la minería es considerada como una ocupación de alto riesgo. De acuerdo con datos de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), aun cuando representa el uno por ciento de la fuerza de trabajo mundial, el ocho por ciento de los accidentes mortales en el trabajo se registran en este sector.
También las enfermedades profesionales derivadas de esta actividad como la neumoconiosis y la pérdida de la audición por los efectos de las vibraciones, se registran en la fuerza laboral de los mineros.
El 22 de junio de 1995, la Conferencia Internacional del Trabajo adoptó el Convenio 176 sobre Seguridad y Salud en las Minas, así como la Recomendación 183 que lo complementa, con el fin de dignificar las condiciones laborales en dicho sector.