Hiere bala perdida a menor durante ataque a casa en Culiacán
GUADALAJARA, 30 de diciembre (Quadratín México).- Muchos jaliscienses convierten la despedida del año viejo en todo un ritual para atraer el amor, la salud, el dinero, la fortuna o la felicidad al año que está por comenzar, por lo que recurren a ciertas supersticiones.
Con la intención de que el año nuevo sea mejor que el anterior, algunos tapatíos limpian con esmero sus hogares, utilizan incienso, limón u otros químicos, estrenan ropa e intercambian buenos deseos y propósitos en las últimas horas del año.
Algunos de los ritos son salir a la calle con una maleta para que realicen muchos viajes en el año nuevo, cambiar de año con un billete en la mano para lograr dinero, o sentarse y volverse a parar con cada una de las 12 campanadas para atraer matrimonio.
Así como recibir el año nuevo con dinero dentro de los zapatos para tener prosperidad económica, para tener mucha ropa nueva usan ropa interior al revés la noche del 31, o barren de adentro hacia la calle para alejar la mala suerte.
Otros cuelgan una figura de borreguito en la puerta para que no falte dinero, o entierran en una maceta una moneda envuelta en un pedazo de trapo rojo el 31, la desentierran el 1, la guardan todo el año en la cartera y la regalan el 31 antes de efectuar de nuevo el ritual para que se tenga dinero todo el año.
Atraer la fortuna es el deseo común en el último día del año y unos más utilizan el día 31 ropa interior roja para encontrar el amor de su vida o ropa interior amarilla para tener mucha felicidad y alegrías.
La superstición influye también en el menú que se degusta en la tradicional cena de año nuevo, donde las lentejas simbolizan monedas, comer cerdo es presagio de abundancia y los tallarines son señal de vida larga.
Además, se supone que cada uva comida traerá un mes bueno, y acompañadas con el sonido de las campanas del reloj se pide un deseo por cada una de las 12 uvas para que se cumplan el año que está por comenzar.
Algunos jaliscienses conviven año nuevo con familiares, otros con amigos o en pareja, y mucho jóvenes pasan año nuevo en los Pueblos Mágicos de Tapalpa y Mazamitla, lugares que están en la montaña y donde se rentan cabañas, hay paseos a caballo, deportes extremos, entre otras actividades.
Unos más asisten a centros nocturnos de la zona metropolitana de Guadalajara, algunas parejas reservan para cenar en restaurantes, muchos de estos incluyen el espectáculo de algún cantante o cómico.
Asimismo, niños y adolescentes disfrutan estas vacaciones decembrinas de manera gratuita las pistas de hielo instaladas en municipios de la zona conurbada: Guadalajara, Zapopan, Tonalá, Tlaquepaque y Tlajomulco de Zúñiga.
Algunos más decidieron pasar año nuevo en las playas de Jalisco, unos más recibirán año nuevo a bordo del tren que va de Guadalajara al municipio Tequila, donde se disfrutarán del vagón de lujo, vagón bar, vagón comida ó de una noche mágica llena de agradables sorpresas.
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