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MOSCÚ, 28 de junio (Quadratín México).- El conflicto en Siria parecía alejarse de una resolución interna, mientras que el gobierno de Rusia manifestó que de ninguna manera apoyará una injerencia extranjera en el país, como podría proponerse en la conferencia internacional del próximo sábado en Ginebra, informó hoy el ministro ruso de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.
“No apoyaremos ni podremos apoyar injerencias ni la imposición de recetas foráneas (a Siria). Se necesita favorecer el diálogo y no anticipar los resultados del diálogo”, dijo Lavrov en rueda de prensa al término de su encuentro con su colega tunecino, Rafik Abdessalem.
“No creo que la OTAN tenga intención alguna de repetir en Siria el escenario libio”, señaló Lavrov, en referencia a los casi siete meses de bombardeos en 2011 de la alianza atlántica contra Libia, bajo el pretexto de proteger a la población civil. Pero se ha informado que en la reunión de la alianza atlántica con Rusia este sábado se intentará convencer a Moscú sobre la necesidad de intervenir en el país árabe.
Las declaraciones de Rusia se daban al tiempo que en Damasco se registró una fuerte explosión ocurrió hoy en el estacionamiento del Palacio de Justicia de Siria, en Damasco, con un saldo de al menos tres personas heridas y daños materiales a unos 20 vehículos, informó la agencia siria de noticias SANA.
De hecho, la violencia en Siria se ha incrementado desde que la Misión de Observadores de las Naciones Unidas, desplegada para verificar el cumplimiento del cese al fuego, suspendió sus operaciones el pasado 16 de junio debido a la escalada del conflicto.
Los cuerpos de bomberos acudieron al lugar y lograron en pocos minutos extinguir el incendio provocado por el estallido, según la agencia SANA, que atribuyó el atentado a “terroristas”, como llaman los medios afines al régimen sirio a los opositores.
Este atentado se produce un día después de que al menos siete personas, entre ellas tres periodistas, murieron en un asalto a la televisión siria gubernamental Al Ikhbariya, del que el régimen culpó a un “grupo terrorista armado”.
Este jueves, al menos 30 personas han muerto en diversos actos de violencia, con lo que se suman a los más de 100 fallecidos la víspera, la mayoría en la norteña provincia de Idleb, fronteriza con Turquía, según los opositores Comités de Coordinación Local.
Advirtió sobre las consecuencias catastróficas de una agresión extranjera contra Siria, al comentar una posibilidad en ese sentido por parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Por su lado, la oposición siria afirmó que no aceptará un plan de transición política propuesto por el enviado especial Kofi Annan, a menos que el presidente Bashar al-Assad dimita antes de la formación de ese gobierno de unidad.
Según fuentes diplomáticas en las Naciones Unidas, la propuesta del enviado especial de la ONU y la Liga Arabe, cuyo objetivo es poner fin al conflicto de 16 meses en Siria, no estipula la renuncia de Al-Assad.
“La propuesta sigue siendo oscura para nosotros, pero si no se estipula claramente que Al-Assad deba renunciar, será inaceptable para nosotros”, señaló Samir Nashar, un miembro ejecutivo del Consejo Nacional de Siria, reportó el canal árabe de noticias Al Arabiya.
El enviado de paz propone un gobierno de transición de Siria, incluyendo miembros de ambas partes enfrentadas, indicaron fuentes diplomáticas en Naciones Unidas.
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