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CIUDAD DE MÉXICO, 28 de mayo de 2025.- El Banco de México ajustó los pronósticos de crecimiento del PIB de México a una tasa de variación de 0.1 por ciento en 2025 y para 2026 la expectativa puntual es de 0.9 por ciento, lo que representa una revisión a la baja respecto del crecimiento de 1.8 por ciento.
Y aunque la inflación general se redujo entre el último trimestre de 2024 y el primero de 2025, se situó en 4.22 por ciento en la primera quincena de mayo, de acuerdo al Informe Trimestral enero-marzo 2025 presentado por la Junta de Gobierno del Banxico.
El documento detalla que en el primer trimestre del 2025, la economía nacional mostró nuevamente debilidad debido a la incertidumbre generada por los aranceles anunciados por el gobierno de Estados Unidos, el cual afectó el comportamiento de los agentes económicos en el periodo al incidir sobre inversión y consumo.
“Hacia delante, se espera que la economía nacional se mantenga con atonía. Los cambios en la política comercial de Estados Unidos, los cuales podrían implicar afectaciones profundas en los flujos comerciales y en la economía mundial, representan un importante riesgo a la baja para la economía nacional”, reitera el informe del Banxico.
Al igual que la gobernadora del Banxico Victoria Rodríguez Ceja advirtió en comparecencia ante la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado de la República, el 10 de abril pasado, las perspectivas del Banco Central señala que en el primer trimestre de 2025 la actividad económica nuevamente mostró debilidad.
En el trimestre reportado, la inflación subyacente anual pasó de 3.68 a 3.65 por ciento y se ubicó en 3.97 por ciento en la primera quincena de mayo.
Por su parte, la inflación no subyacente anual se redujo de 7.07 a 3.86 por ciento entre trimestres y se reflejó, principalmente, en el desvanecimiento de los efectos de los choques de oferta que afectaron los precios algunas frutas y verduras y que se desvanecieron hacia finales de 2024.
En la primera quincena de mayo, la inflación no subyacente registró 4.78 por ciento influida, principalmente, por la mayor variación anual de los precios de los productos pecuarios.