Defiende Sheinbaum desaparición del INAI y otros 6 organismos autónomos
CIUDAD DE MÉXICO, 17 de junio de 2016.- Al reconocer avances con la reforma a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal para reestructurar y fortalecer a la Secretaría de la Función Pública (SFP), el diputado Omar Ortega Álvarez exhortó al Ejecutivo Federal a demostrar un real interés en combatir la corrupción y aprovechar este nuevo marco jurídico que fortalece a la Secretaría de la Función Pública y nombrar a un nuevo Titular en esa dependencia, ya que Virgilio Andrade Martínez es el claro ejemplo de la ineficacia, la simulación y el conflicto de interés.
El parlamentario perredista reconoció que la comisión de dictamen incluyó varias de las propuestas contenidas en la iniciativa que él presentó recientemente, y exhortó al Ejecutivo a limpiar la casa:
“Queremos hacer un llamado al Presidente de la República para que, por una cuestión ética y una vez que entre en vigor esta nueva reforma, se inaugure un nuevo comienzo con la asignación de un nuevo titular de la SFP que concite el más amplio consenso entre la sociedad”, puntualizó.
En otras ocasiones –dijo-, ya se había planteado esta petición al Ejecutivo Federal por otros motivos, pero todos los esfuerzos han sido desechados, restándole legitimidad al órgano de control interno.
Quizá por ello mismo ha sido ineficaz en el combate a la corrupción en la administración pública y sus omisiones hayan tenido que subsanarlas otras instancias, como la Auditoría Superior de la Federación, apuntó.
Puso como ejemplo del pobre desempeño de Andrade Martínez y de la SFP que encabeza el caso de la “casa blanca”, inmueble propiedad de la empresa que ha sido la más beneficiada por el actual Ejecutivo Federal desde que era gobernador en el Estado de México hasta ahora y que fue “vendido” con exageradas “facilidades” a la esposa del mismo titular del Ejecutivo Federal.
La reforma que ahora aprueba el Legislativo –añadió Ortega Álvarez- es una gran oportunidad para restituirle legitimidad a la SFP. Mantener a Andrade Martínez, en cambio, sería una gran incongruencia porque simboliza la ineficacia, la simulación, el conflicto de interés y, a final de cuentas, corrupción e impunidad.
“Con esta reforma, los legisladores damos al Ejecutivo el instrumento y el marco jurídico necesario para emprender cambios de fondo. El presidente tiene ahora en sus manos la posibilidad de demostrar que también quiere una transformación real presentando un nuevo nombramiento ante la Cámara de Senadores para que sea ratificada una persona con alta calidad ética, que prefigure el nivel del compromiso con el combate a la corrupción que el servicio público necesita”, reiteró.