Alerta abandono de negocios y habitantes del centro de Culiacán
CIUDAD DE MÉXICO, 15 de febrero de 2017.- En un día de agenda privada, el presidente Enrique Peña Nieto se reunió en la Residencia Oficial de Los Pinos con representantes de Altán Redes SAPI de C.V., empresa ganadora del concurso público internacional de la Red Compartida, un proyecto derivado de la Reforma de Telecomunicaciones.
La Presidencia de la República informó que al recibir a los representables empresariales, el Primer Mandatario extendió un amplio reconocimiento al consorcio por acompañar el proceso de transformación del país, destacando que el conjunto de reformas estructurales reemplaza modelos de desarrollo que habían sido ya rebasados.
El Gobierno de la República refrendó su voluntad por trabajar de manera coordinada con Altán Redes SAPI de C.V. para cumplir las metas del proyecto de la Red Compartida y llevar sus beneficios a todos los mexicanos.
El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, destacó en la reunión la Red Compartida como un proyecto en favor de la inclusión social.
Dijo que asegurará el acceso a servicios de telecomunicaciones de buena calidad y precios más bajos para la gran mayoría de la población.
El presidente de Altán Redes, Eugenio Galdón, acompañado de sus accionistas –que incluyen a Morgan Stanley Infraestructure, CKD Infraestructura México, Caisse de Dépôt et Placement du Québec (CDPQ), Afore Banamex, Megacable, y Alestra-Axtel–, apuntó que el proyecto será la “cristalización de las mejores prácticas y tecnologías mundiales” en materia de telecomunicaciones, y que la inversión del grupo es “una señal de certidumbre y confianza en la economía mexicana”.
Los miembros del consorcio refrendaron su compromiso de dar cobertura a por lo menos el 92.2 por ciento de los mexicanos con la red de servicios de telecomunicaciones móviles más moderna y de mayor calidad de México, destacó la Presidencia de la República.
La subsecretaria de Comunicaciones, Mónica Aspe, destacó que el concurso de la Red Compartida se realizó siguiendo las mejores prácticas internacionales en materia de transparencia y rendición de cuentas, y se contó con la participación de Transparencia Mexicana como testigo social, y del Bank of America Merrill Lynch como asesor financiero.