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WASHINGTON, 3 de diciembre, (Quadratín México).- El presidente de la Cámara de Representantes estadounidense, el republicano John Boehner, presentó hoy a la Casa Blanca una contrapropuesta para evitar que el país caiga en el “precipicio fiscal”, sin elevar los impuestos a los ricos.
El plan, que contrasta con la iniciativa presidencial para recaudar 1.6 billones de dólares a través de un alza de impuestos a quienes ganan más de 250 mil dólares anuales, busca elevar los ingresos tapando los huecos del código fiscal.
“Lo que estamos presentando es un plan creíble, que merece una consideración seria por parte de la Casa Blanca. Espero que respondan de manera oportuna y responsable”, señaló Boehner.
Su propuesta desatiende la petición presidencial de incrementar la carga fiscal al 2 por ciento de los estadunidense de más altos ingresos, y propone en cambio aumentar los ingresos en 800 mil millones de dólares reduciendo deducciones y exenciones fiscales.
Asimismo, contempla 600 mil millones de dólares en ahorros en los programas de salud, de acuerdo con los lineamientos que circulan de manera informal en el Capitolio estadounidense.
El plan republicano busca ahorros adicionales por 200 mil millones de dólares a través de revisiones al índice de precios al consumidor.
La administración Obama reaccionó de inmediato con expresiones de rechazo al plan republicano. “La misiva republicana no pasa la prueba del balance”, señaló el director de comunicaciones de la Casa Blanca, Dan Pfeiffer.
El presidente Obama y Boehner tienen previsto reunirse esta noche en la Casa Blanca con motivo de una recepción navideña, pero no esta calendarizada una conversación formal entre ambos.
La víspera, Boehner dijo a la cadena Fox News que las negociaciones con la Casa Blanca se encontraban en punto muerto y argumentó que el presidente no había presentado una propuesta seria que pudiera ser respaldada por los republicanos.
El plan de Obama contemplaba, además del aumento de impuestos a los ricos, un paquete de estímulo fiscal por 50 mil millones de dólares, entre otros puntos.
Estados Unidos podría caer en el llamado “precipicio fiscal”, que incluye alzas de impuestos por unos 400 mil millones de dólares y recortes de gastos por más de 100 mil millones, si no llegan a un acuerdo político antes del primero de enero.
La Oficina Legislativa del Presupuesto (CBO) estima que el país podría caer en una recesión si la Casa Blanca y el Congreso no alcanzan un consenso en las próximas semanas.
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