Vinculan a proceso a ex funcionarios del SAT por presunto fraude
CIUDAD DE MÉXICO, 24 de junio de 2017.- A través de elementos de prueba consistentes, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) capitalina logró que un Juez de Control vinculara a proceso a una mujer de 29 años de edad, por su probable participación en el delito de trata de personas por explotación laboral.
La acusada fue detenida por agentes de la Policía de Investigación (PDI), quienes rescataron a ocho víctimas, entre ellas seis menores de edad, procedentes de diferentes estados del país, a quienes presuntamente la imputada ponía a vender frituras en carretillas y les cobraba hospedaje y alimentación.
Como medida cautelar, el juzgador le impuso a la indiciada la prisión preventiva justificada en el Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla, y fijó un plazo de cuatro meses para el cierre de investigaciones.
De acuerdo con la carpeta de investigación correspondiente, policías investigadores adscritos a la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Trata de Personas, implementaron operativos en la delegación Cuauhtémoc, donde en una primera acción ubicaron y rescataron a tres menores: dos de ellos originarios de Puebla y uno de Veracruz; asimismo se rescató a una mujer de 19 años de edad, identificada como la persona que les hacía de comer a los demás. Todas las víctimas se encontraban al interior de un predio, en la colonia Ex Hipódromo de Peralvillo.
En un segundo dispositivo, en la misma colonia, agentes de la PDI localizaron a tres menores de edad, de Puebla y Chiapas, y a un hombre de 20 años, quienes fueron encontrados mientras comercializaban con productos comestibles, que trasladaban en carretillas en zonas como la Colonia Roma, Zona Rosa o Chapultepec.
Como parte de las diligencias practicadas, se obtuvo que la mujer se trasladó a los estados de Puebla, Veracruz, Chiapas e Hidalgo, donde captaban a personas menores de edad, con la finalidad de traerlas a la Ciudad de México para que trabajen en la venta de frituras en las carretillas.
Los implicados ofrecieron a sus víctimas un pago mensual, alojamiento y alimentación; sin embargo, cuando éstas comenzaron a laborar se les impuso una renta por concepto de hospedaje y cada quien tenía que pagarse su comida, luego de laborar de siete a ocho horas diarias, de lunes a sábado.
Los menores fueron reintegrados a su núcleo familiar.
El delito de trata de personas, en su modalidad de explotación laboral infantil, afecta el cumplimiento de los derechos previstos a favor de las niñas y los niños víctimas de este ilícito y constituye un riesgo, para la integridad física de los infantes, ya que al realizar labores que no van de acuerdo con su edad, están expuestos a sufrir lesiones, enfermedades y accidentes, violentando así el derecho fundamental al libre desarrollo de su personalidad.