HB10, ambigua ante delitos para verificar estatus migratorio en EU: SRE
CIUDAD DE MÉXICO, 1 de febrero de 2018.- Luis Raúl González Pérez puso en marcha los trabajos del Seminario Análisis Integral de la Política Migratoria en los Estados Unidos de América. Un año de Incertidumbre, organizado por la CNDH, UNAM y Fundación Carlos Slim y aseguró que la dignidad humana no es negociable.
El ombudsman nacional, González Pérez, se añadió en un comunicado, afirmó que la posibilidad de que la dignidad humana se niegue y transgreda no es cuestión del pasado, sino riesgo presente y una realidad.
«La peor traición que podríamos hacer a la memoria es voltear la cara y no enfrentar la realidad que se está construyendo. La paz, la tolerancia, el entendimiento, el respeto mutuo y la concordia no pueden dejar de ser las bases que sustenten la convivencia entre los países y las personas», sentenció.
Señaló que ante el discurso de odio contra personas migrantes en Estados Unidos y las políticas de actuación que desconocen los principios más elementales de la dignidad, no tienen cabida la indiferencia, indecisión y falta de acción. La dignidad humana, enfatizó, no se negocia, y en este tema no se puede bajar la guardia.
Los momentos que vivimos –aseguró– deben ser de unidad y no de distancia, de entendimiento y no de diferencia, de conciliación y no de enfrentamiento. Supusimos que nunca más tendríamos que actuar ante voces cuyo sonido fuera el eco de la discriminación y la exclusión. Hoy, las amenazas que se ciernen en torno a los derechos y la dignidad de las personas nos llaman a la acción.
González Pérez refirió que identificar como ‘héroes’ a policías que participan en acciones contra la migración indocumentada y considerar delincuentes potenciales o amenazas latentes a la seguridad de las personas a quienes se encuentran en condición migratoria irregular, sólo abonó a la construcción del enemigo ficticio que justifica el discurso de odio.
Por ello, cuestionó la gloria que pueda existir en detener a mujeres, niñas, niños, adolescentes o personas mayores desarmadas, con recursos económicos muy limitados, que no hablan inglés y que, en razón de ello, difícilmente podrán hacer valer sus derechos. Y reiteró que el discurso de odio pretende imponer en el imaginario colectivo de los estadounidenses palabras y estereotipos que intimidan, discriminan y promueven la violencia.
Tras invitar a los presentes a reflexionar sobre las razones que llevaron a nuestros compatriotas a abandonar el país, y la forma como Estado y sociedad pueden apoyarlos y atender sus necesidades, demandó analizar la forma y términos conforme a los cuales tratamos en México a los migrantes irregulares de otros países, para lograr congruencia y coherencia en nuestras acciones.
Una institucionalidad sólida y un Estado de Derecho fuerte –explicó– pueden aportar en la defensa y respeto de los derechos humanos, y enfatizó que las acciones para la defensa de los migrantes ante Tribunales y la promoción de acciones ciudadanización son ejemplos claros de que, ante la arbitrariedad, las instituciones sólidas, la aplicación y vigencia de las leyes son el mejor y más efectivo contrapeso.
En el auditorio Jorge Carpizo de la Coordinación de Humanidades de la UNAM, Jorge Madrazo Cuéllar, coordinador de Programa para el Apoyo de los Mexicanos en el Extranjero de la UNAM en Seattle, agradeció a la CNDH su participación y los esfuerzos para reunirse hoy, lo que evidencia el liderazgo que este Organismo Nacional tiene en México en la protección de los mexicanos aquí y en el extranjero. También agradeció a la Fundación Slim, así como la presencia de académicos que vinieron de Estados Unidos a participar en esta reunión.
Ricardo Mújica Rosales, representante de la Fundación Carlos Slim, dijo que este organismo ha trabajado conjuntamente con la CNDH y la UNAM sobre la situación de vulnerabilidad que viven muchos compatriotas en Estados Unidos, pues a raíz del cambio de la administración en ese país ha habido un ataque frontal hacia toda esa población.
Lo anterior –dijo–, también dificulta el trabajo que realizan instituciones públicas y privadas, académicas y organizaciones de la sociedad civil preocupadas y ocupadas sobre lo que pueden hacer desde sus ámbitos de actuación para contribuir en la defensa de los connacionales que están en Estados Unidos. De ahí la necesidad de sumar esfuerzos entre las distintas instituciones, en especial, las convocantes al seminario, para contar elementos que permitan ayudar a los compatriotas a tener una mejor situación de vida.
Mónica González Contró, abogada general de la UNAM, comentó que desde que llegó el actual Presidente de Estados Unidos, la UNAM ha emprendido diversas acciones para mitigar el impacto de extrema vulnerabilidad que tienen los connacionales que viven en ese país, en especial, en materia de derechos humanos.
Subrayó que el entorno y contexto en que viven nuestros compatriotas es de alta vulnerabilidad y riesgo permanente, por lo que la herramienta para combatir este flagelo son los derechos humanos, para generar condiciones de igualdad entre todas y todos. Desde este enfoque, concluyó, es pertinente reflexionar sobre esta política migratoria a un año de haber sido impuesta en discursos, la cual no se sabe si se cumplirá o de qué forma se llevará a cabo.
En este acto también se contó con la presencia en el presídium de Domingo Alberto Vital Díaz, coordinador de Humanidades de la UNAM y Édgar Corzo Sosa, quinto visitador general de la CNDH.