Destinará Brugada 100 mdp para la salud mental en 2025
CIUDAD DE MÉXICO, 25 de julio de 2016.- El gobierno de la Ciudad de México, a través de la Agencia de Protección Sanitaria (APS) dependiente de la Secretaría de Salud (Sedesa), ha realizado 928 visitas de verificación sanitaria en estéticas, peluquerías, salones de belleza y spa, entre otros establecimientos donde se efectúan procedimientos no quirúrgicos, de los cuales se han sancionado a 556 por incumplir con la norma sanitaria.
La dependencia local informó que de los establecimientos amonestados, 29 por ciento no contaban con aviso de funcionamiento y en 19 por ciento, los utensilios de trabajo -como tijeras, peines, pinzas cosméticas, sillones y mandiles- no se encontraban limpios o en su caso sin esterilizar.
La sanción aplicada consiste en una amonestación con apercibimiento por incumplir con la norma sanitaria y con la intención de que se corrijan las irregularidades en un plazo determinado, bajo la advertencia de suspensión de actividades en caso de no atender las deficiencias y las recomendaciones.
De esta manera, con la campaña “Que la belleza no te cueste la vida”, que se hace de manera permanente desde el año 2013, la SEDESA, a través de verificadores de Servicios de Salud y Cuidados Personales de la APS, supervisa los negocios dedicados al embellecimiento físico mediante procesos no invasivos al cuerpo, es decir que no atraviesan la piel y no inyectan sustancias, tal es el caso de los cortes de cabello, peinados, masajes terapéuticos y relajantes, mascarillas, depilaciones y decoración de uñas.
El propósito además de que se dé cumplimiento a lo establecido en la Norma Sanitaria y la Ley General de Salud que corresponde a estos giros, es evitar que se ofrezcan otro tipo de servicios que puedan poner en riesgo a la salud como cirugías estéticas y reconstructivas o bien, donde se emplean procedimientos físicos o químicos invasivos en la piel que implican la introducción de sustancias para resaltar, delinear o corregir determinados rasgos de la anatomía.