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ZURICH, SUIZA, 7 de enero (Quadratín México).- El delantero argentino Lionel Messi fue galardonado con el Balón de Oro, premio que designa al mejor jugador del mundo, por cuarto año consecutivo, algo sin precedentes en la historia del fútbol.
El jugador sudamericano se ha impuesto en las votaciones a su compañero del Barcelona, el español Andrés Iniesta, y al portugués del Real Madrid, Cristiano Ronaldo, ganador en 2008.
Messi, que deja atrás los registros de jugadores de leyenda como los holandeses Johan Cruyff y Marco Van Basten y el centrocampista Michel Platini, ganadores en tres ocasiones del Balón de Oro, ha sido reconocido por su incansable progresión a pesar de que su equipo cerró el curso en esta ocasión con la Copa del Rey como único éxito.
El delantero argentino se convirtió en el máximo goleador en partidos oficiales en la historia del club Barcelona (233 goles el 20 de marzo de 2012) y batió el récord de tantos anotados en una temporada de la Liga de Campeones (14) .
Además, cerró 2012 con un nuevo registro, el del mayor número de goles en un año natural. Dejó atrás los 85 anotados por el ‘Torpedo’ Müller en 1972.
La estadunidense Abby Wambach, campeona olímpica en Londres 2012 y máxima goleadora estadunidense logró el Balón de Oro Femenino.
A su vez, el seleccionador de España, Vicente Del Bosque, se llevó el premio al mejor entrenador de 2012, superando en la votación final a Jose Mourinho y Josep Guardiola.
Del Bosque consigue este reconocimiento por primera vez en su carrera y se saca la espina de la edición de 2010, a la que llegó como gran favorito tras guiar a España a su primer título mundial, pero donde vio como Mourinho era finalmente el que subía a recoger el trofeo.
Esta vez el técnico salmantino también llegaba como principal aspirante, pero no hubo sorpresa de última hora y sí conquistó el objetivo, recibiendo el premio que le entregó el seleccionador brasileño Luiz Felipe Scolari.
“Es un orgullo representar al fútbol español, a la selección española. Dar las gracias a todos los jugadores, nos hacen ser mejores. Son buenos y tienen un comportamiento excelente”, comentó Del Bosque, que se acordó también de los otros dos candidatos, Mourinho y Guardiola, en su dedicatoria.
En la ceremonia, el gran ausente fue el portugués, que a pesar de ser uno de los tres finalistas declinó la invitación, alegando que tenía que trabajar porque su equipo juega el miércoles ante el Celta de Vigo en la vuelta de los octavos de final de la Copa del Rey.
El que sí estuvo fue Guardiola, que desde junio está sin equipo, disfrutando en Estados Unidos de un año sabático, aunque antes de la gala ya dijo que ha decidido volver pronto, aunque todavía no sabe en qué club.
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