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DETROIT, 29 de octubre (Quadratín México).- Marco Scutaro pegó el imparable clave que produjo una carrera, para darle a los Gigantes su segundo campeonato en tres años al vencer 4-3 a los Tigres de Detroit en diez vibrantes entradas, en el cuarto duelo de la Serie Mundial.
El venezolano encaminó el triunfo de San Francisco, que ayer, por primera vez, se vio en aprietos en esta Serie Mundial, que al final se llevó en una contundente barrida de 4-0.
Los Gigantes se llevaron su cuarto triunfo gracias al sencillo remolcador de Scutaro con dos outs en la parte alta de la décima ante el lanzador Phil Coke.
La coronación de la novena de la bahía se selló cuando Miguel Cabrera, el artillero de Detroit que ganó la Triple Corona en la temporada regular, dejó pasar el tercer strike por todo el medio del plato ante el cerrador Sergio Romo, el primer mexicano en la historia que gana dos Series Mundiales sumada al cetro que alcanzó San Francisco en 2010.
“Me siento bendecido y orgulloso de tener sangre mexicana”, dijo el cerrador de los Gigantes, quien ponchó a los tres enemigos que enfrentó para asegurar la victoria. “¡Es maravilloso!”
El séptimo título para la franquicia se completó gracias a la conjunción de un pitcheo soberbio y bateo oportuno. Buster Posey puso en ventaja a los Gigantes 3-2 con un jonrón de dos carreras en la sexta, pero Delmon Young replicó con un vuelacercas en la parte baja que igualó el duelo a tres carreras. Cabrera había adelantado 2-1 a los Tigres con un cuadrangular de dos anotaciones en el tercer episodio.
La carrera de la victoria se gestó con un sencillo de Ryan Theriot ante Coke para abrir el décimo. Brandon Crawford se sacrificó, con lo que Theriot avanzó a la segunda base, para esperar el bateo oportuno de Scutaro, tras un ponche de Ángel Pagan, para sentenciar la serie a su favor.
Los Gigantes culminaron un octubre inolvidable con el título, después de que habían enfrentado la eliminación en sus series anteriores frente a los Rojos y los Cardenales, a los que suceden como monarcas.
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