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NEWTON, 16 diciembre (Quadratín México).- Adam Lanza tenía 20 años de edad, vivía en el seno de una familia acomodada económicamente en una casa de media clase alta y aunque nadie realmente se acuerda bien de él, lo poco que se dice es que era un joven que estudiaba mucho y vestía bien.
El hecho es que el viernes pasado, Adam perdió absolutamente el control y decidió matar a su padre y luego ir tras su madre a la escuela primaria donde ella trabajaba.
Allí, forzó la entrada de seguridad y en su camino al salón de su madre mató a una maestra y un psicólogo, para luego cumplir con su objetivo, pero ya completamente ido empezó a disparar sobre decenas de niños y niñas de entre cinco y 10 años sin pronunciar una sola palabra.
Aparentemente, se suicidó luego de matar a un total de 20 niños y seis adultos en lo que hoy es considerado una de las peores matanzas en una escuela de Estados Unidos de que se tiene registro.
Hoy la policía del estado de Connecticut dice haber encontrado lo que llaman “pruebas muy sólidas” que esperan que pueden responder las preguntas sobre los motivos del pistolero.
Ahora, Lanza, quien pasara sus años casi desapercibido, ha conseguido que sus ex compañeros hablen de él. Hoy es “famoso” de mala manera, pese a que no se acuerdan mucho de él.
Dicen que se vestía con elegancia y trabajaba duro, pero que apenas esbozó alguna palabra durante su paso por esa escuela.
La policía está investigando si sufría algún trastorno de la personalidad, aunque es obvio que tenía algún padecimiento mental grave.
Adam pasó sus años evitando ser el centro de atención. Los medios de comunicación de Estados Unidos no han podido encontrar ninguna fotografía de él en su anuario de la escuela secundaria de 2010, pero un canal de TV encontró una de 2008.
“Tímido con las cámaras”, decía su entrada. Al parecer, no tenía página de Facebook y su presencia en internet era mínima.
Adam Lanza vivía con su madre en un barrio acomodado de Newtown, Connecticut, a unos ocho kilómetros de la escuela de Sandy Hook, a la que según algunos informes había asistido en su juventud.
Luego se pasó a la escuela secundaria Newtown High School, pero hizo pocos amigos. Inteligente pero tímido y nervioso, son los recuerdos más comunes de quienes lo conocieron.
Una excompañera de clase, Olivia DeVivo, le dijo al diario The New York Times: “Nunca lo vi con alguien y ni siquiera puedo pensar en una persona que haya estado con él”.
Pero su tía, Marsha Lanza, dijo que había sido criado por padres cariñosos y presentes que no habrían dudado en buscar ayuda para su hijo en caso de que la necesitara.
Los padres se habían divorciado en 2009, después de haberse separado por lo menos tres años antes. Su padre, Peter Lanza, se trasladó a Stamford, Connecticut, y se volvió a casar tres años después.
Adam Lanza entró a la fuerza a la escuela de Sandy Hook. Su madre, Nancy, se quedó en la casa familiar, donde se cree que fue asesinada por su hijo. Trabajaba como profesora.
El hermano mayor de Adam, Ryan, de 24 años, se había trasladado a Hoboken, Nueva Jersey, después de graduarse de la Universidad de Quinnipiac, también en Connecticut. Trabaja para la empresa de servicios profesionales Ernst & Young.
Los medios lo señalaron erróneamente al principio como el autor de la matanza.
Ryan Lanza ha estado ayudando a la policía con su investigación y los medios de Estados Unidos informan que él les dijo que no había tenido contacto con su hermano desde 2010.
Los dos niños quedaron supuestamente muy afectados por la separación y el divorcio de sus padres.
Los vecinos dicen que quedaron deprimidos, pero que su madre había seguido trabajando para protegerlos.
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